El Tiburón devora al Betis

Un triplete de Ferran Torres mantiene al Barcelona agarrado al sueño de revalidar su título de Liga. El equipo catalán se llevó una trabajada victoria en campo del Betis (2-4) y sobrevivió a un arrebato de Isco que a punto estuvo de dejarlo fuera de combate. Los goles de Joao Félix y el propio delantero valenciano en los minutos 90 y 92, respectivamente, cerraron un buen partido del vigente campeón que le reafirma en medio de sus eternas dudas.

No le tembló la mano a Xavi a la hora de diseñar una alineación donde la edad de los jugadores carecía de importancia. O si no que se lo pregunten a Lamine Yamal y Pau Cubarsí, 32 años entre los dos, uno menos de los que tiene Gundogan. El extremo ya está consagrado pese a su tierna edad y para el central era su estreno en la Liga después de haber debutado con el primer equipo culé en la Liga.

Enfrente, un Betis plagado de bajas, una decena entre lesiones y futbolistas enrolados en la Copa África, que apenas olió la pelota en la primera mitad, más allá de la ocasión clarísima que marró Luiz Henrique nada más empezar. Su vaselina ante la salida de Iñaki Peña se marchó arriba por poco y empezó el monólogo de los visitantes, que se apropiaron de la pelota.

De las pocas certezas este impredecible Barça de Xavi es que es un equipo muy diferente con o sin Pedri. Cuando está sobre el césped, y acompañado además por otros dos peloteros de primera como Gundogan y Frenkie de Jong, el Barça sabe lo que lo hace, como si todos sus compañeros se contagiaran de la sabiduría del canario.

Controlado el juego, en el minuto 20 lanzó la dentellada Ferran Torres, precisamente a pase de Pedri. Un rebote desafortunado tras un pase de Gundogan dejó solo ante Rui Silva al 8, que cedió a su amigo para que marcara a puerta vacía. El gol sonaba justo con la tendencia del partido y si el Barça no se fue con más ventaja al descanso fue porque Lamine estrelló un disparo tremendo contra el palo y porque el VAR anuló otro tanto de Lewandowski por un fuera de juego milimétrico.

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— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) January 21, 2024

Arrebato de Isco

Y nada más empezar la segunda parte, el segundo embiste letal del Tiburón. La jugada del 0-2 se inició con un cambio de juego sobresaliente de Cubarsí y se calentó en los pies de Lamine, que se fue como quiso de Abner hasta ganar la línea de fondo y estrelló su centro contra el palo. Ferran Torres volvió a marcar a placer cogiendo el balón rechazado y culminando la jugada trenzada por los descarados adolescentes del Barça.

Corría el partido peligro de derrumbe definitivo a favor de los culés, pero emergió la figura de Isco. El ex jugador del Real Madrid había pasado completamente inadvertido en la primera parte, pero regaló una de sus súbitas sobredosis de talento para empatar el partido anotando dos goles en apenas tres minutos. Ver para creer.

En el primero, aprovechó un mal despeje de la defensa del Barça para enganchar un impresionante remate a botepronto que se fue a la red. En la siguiente jugada peligrosa del Betis, Isco alargó la pierna en el aire para dibujar una vaselina preciosa encima de Iñaki Peña. Anulado en primera instancia, el VAR corrigió la jugada y confirmó la legalidad de la acción. Partido empatado en un pispás y media hora de juego por delante.

La reacción de Xavi rejuvenecer aún más a su equipo metiendo a Vitor Roque por Lewandowski. El partido había cambiado por completo. El Betis era otro, se había quitado los complejos y bajo el mano de Isco se lanzaba a por la victoria ante un rival subido una vez más a una montaña rusa. Nadie podrá decir que los partidos del Barcelona son aburridos…

Joao Félix… y Ferran de nuevo

Superado el arrebato de Isco, se volvieron a igualar las fuerzas y el partido ingresó en una calma tensa donde cualquier zarpazo podía desequilibrarlo de forma definitiva. Ferran tuvo un par de ocasiones para firmar triplete, pero esta vez no pudo morder. Respondió Luiz Henrique con un disparo que a punto estuvo de confirmar la remontada del Betis. El duelo estaba quebrado.

Cubarsí, agotado por su primer gran partido en la élite, pidió el cambio y Xavi lo cambió por Joao Félix, clara declaración de intenciones para ir a por los tres puntos. Quedaban diez minutos para evitar que el Madrid se escapara todavía más en la clasificación después de su agónica remontada ante el Almería.

Y hubo que esperar hasta el minuto 90 para ver al banquillo azulgrana sonreír de nuevo. Joao Félix exhibió su talento, ese que muestra en función de su estado de ánimo, para rematar un contraataque de los suyos con un excepcional remate con el exterior del pie. Y con el Betis ya volcado en busca del empate, llegó el golpe definitivo de Ferran, su tercer gol de la noche. El Tiburón y su mentalidad de hierro pueden ser un buen asidero para las dudas que suelen agobiar al Barça y que quedan un poco apaciguadas gracias a este valioso triunfo en Sevilla.