Un Clásico de vicio en Miami

Puede que se dispute a más de 7.000 kilómetros, que se juegue en pleno mes de julio con Cristiano de vacaciones o que sobre el césped del Hard Rock Stadium vaya a estar un Neymar con la cabeza puesta en el PSG. Aquí no hay amistosos que valgan: el Clásico siempre prevalece porque el orgullo está en juego. Real Madrid y Barcelona se verán las caras en la madrugada del sábado al domingo en un partido que ha desatado la locura en Miami, que será la primera ciudad fuera de España en albergar el partido más importante del mundo.

Esto habría sido difícil de imaginar hace unos años pero el fútbol evoluciona y para costear los fichajes multimillonarios de jugadores de élite hay que aceptar ciertos compromisos comerciales. El partido no pega por el lugar, temperatura, época del año y más cuando en el horizonte se vislumbra un doble enfrentamiento en la Supercopa de España (13 y 16 de agosto) pero todo sea por el espectáculo. Las 65.000 localidades están reservadas desde hace meses y se han llegado a pagar hasta 2.000 dólares por una entrada. Locura total.

No será el mejor partido de la historia en lo futbolístico porque ambos equipos están en pleno rodaje pero siempre que Real Madrid y Barcelona comparten campo hay morbo. Millones de espectadores presenciaran un partido donde ambos equipos expondrán al mundo sus nuevos fichajes y donde los de Zidane intentará sumar su primera victoria de la pretemporada para eliminar las dudas que quedaron después de la goleada del Manchester City del pasado martes.

Vuelve Ramos y, ¿se despide Neymar?

Para este amistoso con aroma a partido oficial regresa Sergio Ramos. El capitán se ha recuperado de sus problemas en el oído derecho y hará su debut en la gira americana con el objetivo de solucionar los problemas defensivos vistos en los dos primeros partidos del año para los de Zidane. El líder llega para comandar un equipo donde no estará Cristiano Ronalo que sigue de vacaciones hasta primeros de agosto y que casi está descartado para la final de la Supercopa de Europa ante el Manchester y que volverá en uno de los dos partidos oficiales ante el Barcelona.

En el primer Clásico de la temporada si estarán Theo Hernández, Jesús Vallejo, Marcos Llorente y Dani Ceballos, los flamantes fichajes del Real Madrid que disputarán su primer Real Madrid – Barcelona de los muchos que les quedan por disputar. Y mientras tanto en la Castellana esperan a un Mbappé, por el que también se ha interesado el conjunto culé que ‘robárselo’ a la entidad madridista. Ese Clásico se disputará en los despachos.

Algunos miembros de la Quinta de Asensio debutarán en un Clásico que podría ser el último de Neymar. Parece que el brasileño ha llegado a un principio de acuerdo con el PSG y que en los próximos días dará el ‘sí’ definitivo al club francés que realizará el fichaje más caro de la historia en una operación que podría rondar los 222 millones de euros. La posible marcha de Neymar está en la cabeza de la expedición culé en Estados Unidos que podría quedar muy tocada si se marcha uno de sus máximos exponentes por el que se hizo un esfuerzo muy grande en su día e incluso su fichaje acabó en los juzgados.

Bale vs Messi

Sin Cristiano Ronaldo, Bale será el líder del Real Madrid ante un Barcelona comandado por Messi. Después de una temporada pasada frustrada por las lesiones, el galés ha vuelto más fuerte que nunca dispuesto a poner fin a los rumores sobre su rendimiento. El atacante sabe que es este año o nunca y que tendrá que cumplir si no quiere verse inmerso en un posible traspaso dentro de un año.

Muchas informaciones han señalado a Bale en caso de una posible venta de un miembro de la BBC si llega Mbappé pero en el club se confía en que el futbolista vuelva a ser el hombre que fue decisivo en la conquista de la Copa del Rey ante el Barcelona y la Décima ante el Atlético de Madrid. El británico tendrá su primer examen ante el Barcelona de un Messi que ha comenzado la pretemporada a un gran nivel.

Constelación de estrellas en Miami

El Clásico es el partido más importante del mundo por la categoría de ambos equipos y porque sobre la hierba del Hard Rock Stadium estarán los mejores jugadores del planeta a excepción de Cristiano Ronaldo. Un partido por valor de 1.000 millones (el valor de mercado que suman los jugadores de ambos equipos) donde la MSN del Barcelona intentará superar al único equipo capaz de haber conseguido enlazar dos Champions de forma consecutiva. 

Keylor, Ramos, Marcelo, Kroos, Modric, Isco, Asensio, Bale, Benzema, Piqué, Busquest, Iniesta, Neymar, Luis Suárez, Messi… una constelación de estrellas se dará en un partido que de amistoso tiene poco: el orgullo está en juego.