Olvido Aguilera reclamará la presidencia de la Federación de Tenis tras otra chapuza de Cardenal

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Escañuela y Aguilera, en una rueda de prensa en el COE.
Francisco Rabadán
  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Olvido Aguilera se convirtió en la única dirigente deportiva sancionada directamente por el propio Consejo Superior de Deportes y no por el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). La número dos de Escañuela fue suspendida cautelarmente por la Comisión Directiva del CSD en julio tras ser elegida como presidenta en funciones en sustitución del mandatario por enfermedad. Cinco días después, el CSD le quitó de la presidencia y puso a Fernando Fernández Ladreda, cuya primera medida fue cesar a la seleccionada Gala León.

Miguel Cardenal urdió este plan, pero calculó mal, ya que el TAD ha archivado –quizá descubrió ahí que ganaría la readmisión del Real Madrid en la Copa– el expediente contra Aguilera, que ahora reclama la presidencia. La propuesta de resolución, que deja otra vez en ridículo al presidente del CSD, la adoptó el Instructor Tomas González Cueto. Este miembro del TAD ha sido enturbiado por entorno de Cardenal, que le acusa de autorizar las elecciones de Villar en 2012. Este hecho es tan cierto como el de que autorizó todas las elecciones de la totalidad de Federaciones, pues era el Presidente de la Junta de Garantías Electorales que tenía dichas competencias.

En varios de sus párrafos, la propuesta de resolución del TAD era terminal para Cardenal al que acusa de «deslizar» acusaciones sin fundamento. Para evitar que la resolución fuera de archivo, Cardenal maniobró a través de Enrique Arnaldoimputado presidente del TAD– para que, en su lugar, la resolución fuera de caducidad; esto es reconocer un mal funcionamiento del propio órgano para no tener que reconocer lo inaudito de las acusaciones.

Olvido Aguilera renunció a todos sus cargos, pero el propio Tribunal no lo consideró válido al mantener la acusación contra ella, la cual había reservado notarialmente la invalidez de dicha renuncia.

En los próximos días, Olvido Aguilera reclamará tomar posesión del cargo, cesando así con el mandato interino Fernández-Ladreda, que con anterioridad era responsable económico de la RFET. Como dato curioso queda que toda Asamblea federativa votó por quitarle el sueldo en presencia del propio Cardenal. El actual presidente no ha devuelto dicho dinero ni el secretario de Estado en Funciones se lo ha exigido.

Según confirman fuentes cercanas a OKDIARIO, Olvido Aguilera tomará posesión del cargo en una semana máximo; convocará elecciones inmediatas para que la democracia retorne a la Federación y dimitirá del puesto. 

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