El Barça asusta: aplasta a Manresa y pone rumbo a semifinales

El cierre a los cuartos de final de la Copa del Rey fue obra y gracia del Barça, que no dio opción a Baxi Manresa (107-70) en una batalla de estilos en el que los culés compraron el ritmo frenético de sus vecinos para acabar acribillándoles por pura calidad, con una paliza de anotación exagerada. Los pupilos de Pedro Martínez, que llegaban con dos de sus estiletes, Bako y Moneke, entre algodones, cuajaron un gran primer cuarto pero acabaron sucumbiendo ante una versión sobresaliente de un Barcelona que por su estado de forma es el gran favorito a conquistar la trofeo de campeón.

Este Barça asusta y lo hace a través de una profundidad de plantilla de la que siempre salen uno o dos jugadores destacados dentro de los teóricos secundarios. En esta ocasión fue Dante Exum el que, junto a los clásicos Mirotic y Davies lideraron una orquesta que funciona en ataque y defensa y convirtió en un espejismo el arranque pletórico de Manresa.

Derbi catalán para poner el sello al viernes y conocer al cuarto y último semifinalista de la Copa de Granada, con UCAM Murcia esperando rival y Madrid y Tenerife con su cita a las 18:30 del sábado ya cerrada. El Barcelona, gran favorito más allá de los pronósticos, contra la revelación, un BAXI Manresa divertido a más no poder y con jugadores que enganchan a la afición incondicional y a la neutral.

En el otro lado de la balanza está Mirotic, que tiene calidad como el que más en el campeonato, pero también la capacidad de generar animadversión en los rivales. Sin madridistas en la grada, el internacional español se llevó la pitada de la noche en la presentación de equipos. A partir de ahí, todo juego, y las primeras pinceladas de clase las puso Manresa.

Con un Thomasson –no confundir con el delantero danés– enchufadísimo de inicio en la dirección y la anotación, Manresa alcanzó un pico de acierto altísimo con el que consiguieron las primeras ventajas dentro de un marcador elevado. El Barça atacaba bien pero en defensa no podía con el combo energía-inspiración de BAXI, que se marchaba al final del primer cuarto con proyección de más de 100 puntos, liderando por 22-26.

Inicio de Manresa, reacción culé

La sorpresa parecía posible pese a las dudas sobre el estado físico del icónico Chima Moneke y el gigante Bako, que sumaron dentro de unas limitaciones que no fueron tales en cuanto a minutaje. Junto a ellos y Thomasson surgió el galo Sylvain Francisco, que en su explosión se encontró, como sus compañeros, con una versión coral del Barça en la que destacaron sobremanera dos nombres.

Brandon Davies, como casi siempre, imperial, encontró en Dante Exum la conexión necesaria para que el Barça tomara en el segundo cuarto y sin tardar demasiado el pulso del partido para comenzar con el despegue. El australiano, todo un top-5 de draft, hizo gala de sus condiciones físicas y técnicas en su mejor actuación como jugador culé, ganándose a pulso la sustitución del lesionado Higgins. Así las cosas y con Manresa mucho más bajo en sus virtudes, el descanso llegaba con el 52-42 para el Barcelona, un resultado más cercano a lo previsto.

El Barça apaliza tras el descanso

La segunda parte comenzó con un arreón culé y no hubo más historia a partir de ahí que la escrita por los favoritos. Con un punto más –aún– en ataque y dos en defensa, el Barcelona convirtió el encuentro en un suplicio para un Manresa que encajaba un parcial de 34-11 en el primer cuarto que dejaba el panorama anotador azulgrana por las nubes y el suyo mucho más moderado, con el único respaldo de Thomasson y Francisco.

El último cuarto quedaba, por tanto, como minutos de la basura en un panorama idílico para Jasikevicius, que pudo rotar y dar descanso a su antojo a la espera del choque de semifinales ante UCAM Murcia. Este Barça da mucho miedo y se lleva la primera y única victoria clara en cuartos de final de la Copa del Rey.