Te vas a quedar muerto: así es cómo gastan su dinero los ‘millenials’

En mitad de un entorno desafiante, los millennials han interiorizado la importancia del ahorro y la planificación financiera diaria. Este enfoque se destaca en estudios como «Las Finanzas de los Nativos Digitales y Millennials españoles», realizado bajo la dirección de Laura Núñez-Letamendia, profesora de finanzas en IE Business School y directora del Observatorio del Ahorro Familiar.

Nacidos en los años 80 y principios de los 90, se encontraron con la crisis financiera de 2008 al llegar a la madurez. Más tarde, se vieron golpeados por la crisis del coronavirus y actualmente lidian con una inflación persistente. Estas circunstancias han moldeado su enfoque financiero, llevándolos a priorizar el ahorro, la elaboración de presupuestos y la gestión de deudas.

¿Cómo gastan el dinero los millenials?

Eva Ducka, profesora de EALDE Business School, señala que los millennials han experimentado una disminución significativa en las oportunidades laborales al entraral mercado laboral, lo que ha generado un sentimiento de incertidumbre sobre su futuro. Esto ha llevado a muchos de ellos a planificar meticulosamente su vida, estableciendo hitos y objetivos que incluyen la compra de una vivienda y la planificación familiar.

Aunque los millennials reconocen la importancia de la educación financiera, estudios como el de la consultora PwC indican que solo un 24% de ellos posee ciertos conocimientos en este ámbito. Sin embargo, han adoptado hábitos financieros responsables, como la elaboración de presupuestos y el ahorro, con un 40% de ellos viviendo según un presupuesto y el 76% afirmando que ahorran.

A pesar de haber enfrentado dificultades económicas y acumulado menos riqueza que sus padres, los millennials muestran una actitud conservadora hacia la inversión financiera. Prefieren productos financieros como fondos de inversión y planes de pensiones sobre la bolsa o criptomonedas, con una preocupación particular por asegurar su futuro financiero mediante un plan de pensiones.

A pesar de estos desafíos, una parte significativa de los millennials percibe su nivel de bienestar financiero como medio-alto, demostrando una resiliencia frente a las adversidades económicas. Además, valoran la flexibilidad en el trabajo y la conciliación entre la vida laboral y personal, priorizando aspectos como el teletrabajo y la calidad de vida en sus decisiones profesionales.

Partidas de gastos

Para muchos de ellos, la opción de comprar una vivienda aún no es viable, por lo que destinan una parte significativa de su salario al alquiler.

La pasión por explorar el mundo es característica de esta generación. Muchos optan por viajes ‘low-cost’, compartiendo coche o habitación para minimizar gastos. En estos viajes, el presupuesto se enfoca principalmente en transporte y alojamiento, buscando experiencias económicas pero enriquecedoras.

A pesar de que son nativos digitales, la mayoría de los millennials aún prefieren realizar compras en tiendas físicas. Asocian las compras con el entretenimiento y destinan una parte significativa de su presupuesto a actividades relacionadas con el ocio y el tiempo libre.

Los millennials destinan alrededor de 80 euros mensuales a actividades de ocio, como conciertos, visitas a museos, entradas de cine, práctica de deportes, adquisición de libros, entre otros.

Diferencias y semejanzas con los nativos digitales

Los millennials y los nativos digitales, aunque pertenecen a generaciones diferentes, comparten similitudes significativas en sus hábitos financieros y actitudes hacia el trabajo. Ambas generaciones muestran un interés creciente por la flexibilidad laboral y la conciliación entre el trabajo y la vida personal, priorizando aspectos como el teletrabajo y la calidad de vida en sus decisiones profesionales.

En lo que respecta al ahorro, tanto los millennials como los nativos digitales muestran una tendencia positiva, con un alto porcentaje de ellos afirmando tener este hábito financiero. Aunque enfrentan obstáculos como ingresos insuficientes y falta de incentivos fiscales, ambos grupos reconocen la importancia de ahorrar para hacer frente a imprevistos y alcanzar metas financieras a largo plazo.

Sin embargo, una brecha notable se encuentra en el nivel de conocimientos financieros. Mientras que los millennials muestran cierta falta de educación económica y financiera, los nativos digitales parecen estar aún más desinformados en este aspecto. Esta falta de conocimiento puede dificultar la toma de decisiones financieras acertadas, especialmente en momentos de vulnerabilidad económica.

En cuanto a la inversión, los millennials muestran una tendencia conservadora, prefiriendo productos financieros como fondos de inversión y planes de pensiones. Por otro lado, los nativos digitales muestran un mayor interés en las criptomonedas, a pesar de tener un conocimiento limitado sobre este tipo de inversiones. Ambos grupos se encuentran con barreras para invertir, como la falta de confianza en los intermediarios financieros y la inestabilidad del mercado.

A pesar de los desafíos financieros que han enfrentado, muchos millennials perciben su nivel de bienestar financiero como medio-alto, lo que sugiere una cierta resiliencia frente a las adversidades económicas. Además, ambos grupos valoran la conciliación y flexibilidad en el trabajo como aspectos importantes en su vida profesional, lo que refleja una tendencia hacia un enfoque más equilibrado entre la vida profesional y la vida personal.