El mundo del deporte tiene una asociación cada vez más estrecha con las marcas más exclusivas de relojería, y las suizas tienen prioridad sobre la historia. El nombre de Max Verstappen ya ha quedado grabado a fuego en la historia de la Fórmula 1. El piloto de Red Bull subía al podio en Monza, Italia, el pasado fin de semana, convirtiéndose en el primer piloto que consigue diez victorias consecutivas en el Mundial de Fórmula 1. La racha de Verstappen es un gran hito para el deporte, puesto que ha superado el que consiguió Sebatian Vettel hace 10 años de nueve victorias seguidas. Además, si todo continúa como hasta ahora, se alzará como campeón del mundo por tercer año consecutivo, con tan solo 25 años. Esto no ha pasado desapercibido y hay una marca de relojería suiza que quiere unirse a esa victoria con un reloj que habla de éxito, este es el reloj de Max Verstappen.
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El que podríamos nombrar como el rey invicto de la Fórmula 1 cuenta con una pieza de relojería que le aporta suerte y que no se quita en ninguna de sus carreras. Se trata de un TAG Heuer Monaco Chronograph azul, inspirado en la esfera original, hecho en exclusiva para la escudería Red Bull y un modelo azul personalizado para el actual bicampeón del mundo de Fórmula 1. La correa azul brillante del cronógrafo es una constante en la muñeca del piloto, que no se quita desde, precisamente, el Gran Premio de Mónaco el pasado mes de mayo, cuando lo estrenó.
Unido al talento joven, Tag Heuer Monaco fue un reloj adelantado a su tiempo, puesto que apareció a finales de los años 60 con una caja cuadrada, una gran novedad para la época, introduciéndose a las filas de Tag Heuer junto al Autavia y Carrera. La firma suiza consideró que la mejor manera de presentar al mundo su nuevo Calibre 11, el innovador movimiento automático que querían introducir en sus piezas, era crear un nuevo modelo de relojes. Una de las cosas que la casa Suiza no esperaba es que se convirtiera en un eterno de su catálogo. Cuando Steve McQueen se puso al volante de su Porsche 911S en la película Le Mans de 1971 con un Tag Heuer Monaco en la muñeca, la historia de este reloj quedó ligada al motor para siempre.
El clásico atemporal que es el Tag Heuer Monaco renació de sus cenizas en 1997, reeditado tras salir del catálogo de la firma en 1975. Ahora es impensable deshacerse del icónico diseño cuadrado del Monaco, que es también un símbolo en el mundo del motor. Es verdad que Verstappen ha lucido muchos Tag Heuer a lo largo de su carrera, así como diferentes modelos del Monaco, pero el Tag Heuer Monaco azul con caja esqueleto es toda una oda a su pericia al volante y, definitivamente, su favorito porque es el que ha culminado su suerte. Por eso, con ocasión del 80 aniversario de la histórica carrera de Mónaco, Tag Heuer obsequió a Verstappen con este modelo único, inspirado en todas sus victorias.
El reloj Tag Heuer Monaco de Max Verstappen está equipado con el movimiento Heuer 02, un muy potente motor de la relojera suiza diseñado para medir resultados deportivos y con una reserva de marcha de hasta 80 horas. La esfera esqueleto deja su interior al descubierto, tras un cristal hecho de zafiro y caja de titanio grado 2. En tono azul con detalles en rojo, el diseño hace un guiño a los logros el piloto en cada rincón, siendo el número 1 de Red Bull que está presente en el subcontador y destaca en color rojo el día uno de cada mes. El lema ‘One of One’ define al carácter ganador del neerlandés y dos estrellas en el fondo de la caja y en el lateral representan cada uno de los títulos conseguidos por el piloto desde 2021, pero evidentemente toca actualizarlo. El reloj más vanguardista de los años 70 se ha transformado en un sinónimo de campeones, es por eso que la muñeca de Max Verstappen no podía estar decorada por otra pieza que no fuera un Tag Heuer Monaco.
