Caprichos para sorprender en la cena de San Valentín
Si eres de los que prefiere celebrar San Valentín en casa, ¿qué mejor forma que sorprender con una cena romántica preparada con esmero y cariño? Seguro que ya tienes el menú pensado, pero nunca está de más añadir algún que otro capricho a tan especial ocasión. Porque el champagne, el vino y el chocolate no pueden faltar, aquí te dejamos algunas recomendaciones.
Por un buen brindis
Un buen champán para brindar al comienzo de la cena no puede faltar. Productos delicados como el nuevo espumoso de la maison Louis Roederer, el Collection 242, que acaba de ser nombrado ‘Mejor Champagne sin Añada del mundo’ en el Champagne & Sparkling Wine World Championships, promete no defraudar.
Burbujas rosas son las que ofrecerán el cofre Premium Barons de Rothschild Rosé, un espumoso brillante con ciertos toques en rosa claro, aromas cítricos y notas de bayas rojas, que va perfecto como aperitivo o para acompañar propuestas como sushi, el sashimi o el tartar de atún rojo y otras más tradicionales como la ternera y el cordero. Y por supuesto, una botella de Moet no puede faltar.
Claro que no hay mejor capricho para acompañar a un champagne que un buen caviar. Pero no hace falta irse lejos para descubrir una aunténtica joya. De la sierra de Loja, en Granada, proviene el primer caviar certificado ecológico del mundo 100% español, Caviar Riofrío, que para San Valentín se ha juntado con las burbujas de la maison francesa Piper-Heidsieck para ofrecer un exclusivo pack.
Vinos para acompañar
¿Y en cuanto a vinos? Hay rosados que marcan tendencia como el Domaines Ott Château de Selle o un blanco que enamora como el Menade Sauvignon.
Interesantes opciones tintas son también las que ofrece la bodega Habla, cuyo número 24 es un Cabernet Franc, el primero que la bodega lanza al mercado de esta variedad y una ‘Edición Limitada’ muy especial. U Horcajo 2016, de Cepa 21, una pieza 100% Tempranillo con envejecimiento en barrica de roble francés que acaba de llegar y ya es un icono en el singular Terroir de la bodega.
Chocolates para derretirse
El toque más dulce tampoco puede olvidarse. Porque no hay nada como celebrar el amor con chocolate o bombones, la centenaria Trapa ha lanzado unas cajas especiales para San Valentín, así como los chocolates Amatller, cuya cesta regalo incluye varios chocolates artesanales en un elegante packaging.
Otra opción es mirar hacia Bélgica y apostar por nombres como Chamball Royal, cuya caja regalo llega con aproximadamente 28 bombones redondos de chocolate belga cubiertos con un polvo de frambuesa y rellenos de un sorprendente corazón de licor Crème de Cassis.