Nos gusta la gastronomía italiana. Por eso hay un día de la pasa y por eso se celebran festivales como el del parmigiano reggiano, el queso que decían que era el marido de la cocina italiana. La gastronomía del paese abarca todo el globo terráqueo y en cualquier capital europea hay unos buenos italianos. Lo mismo ocurre en Madrid y Barcelona, que se acumulan los restaurantes y las trattorias. Ha sido difícil hacer una selección, pero hemos elegido algunas de las direcciones de gastronomía de este país del Mediterráneo más interesantes de ambas ciudades. Estos restaurantes italianos merecen la pena.
Madrid
Numa Pompilio
Uno de los restaurantes del grupo El Paraguas más aclamados. No solo por su recetario italiano, también por la majestuosidad de su decoración y por ese patio mágico que encontramos en mitad del Barrio de Salamanca. ¿Algunos de los platos de la carta que demuestran que es uno de los mejores? Spaghetti a la carbonara tradicional, gnocchi con perdiz, tagliatelle con langosta…
Calle de Velázquez, 18.
Pante
Es uno de los restaurantes más aclamados por los italianos que viven en Madrid, y no nos extraña. Es el proyecto gastronómico del triunvirato Alessandro Luchetti, Daniel Cabezas y Antonio Facco, que han traído la gastronomía de la desconocida isla de Pantelleria, al lado de Sicilia.
Calle de Villanueva, 21
Noi
Noi ganó el año pasado con su parmigiana el premio al mejor plato del Festival del Parmiagiano Reggiano. Pero también se ha ganado a pulso ser uno de los mejores italianos de la ciudad gracias a Gianni Pinto. Tiene un punto contemporáneo, y eso gusta si buscamos un plato de pasta diferente. Cuenta con un Sol Repsol, por algo será. Lo mejor para probar su carta es apostar por el Menú Degustación.
Calle Recoletos, 6.
Totó
El restaurante Totó, en pleno Paseo de la Castellana, cuenta con el chef Emilio Celli -de Taverna Trilussa, en Roma- y eso se nota. Por eso, a pesar de llevar no mucho tiempo en la capital, se ha convertido en una de las direcciones gastro en cuanto a pasta se refiere. Estos días hemos podido disfrutar de platos con un toque de parmigiano reggiano, pero el resto del año merece la pena probar sus cacio e pepe con limón -receta típicamente romana- o cualquiera de las pastas que nos ofrezcan, siempre en su puesto. Cenar rodeada de carteles de películas en blanco y negro, junto a Sofía Loren, no se hace todos los días. Totó se inspira, como te puedes imaginar, en el personaje del clásico ‘Cinema Paradiso’.
Paseo de la Castellana, 38.
Don Giovanni
El restaurante de Andrea Tumbarello es una de las direcciones imprescindibles de la capital. El chef siciliano es uno de los más aclamados, por eso su restaurante es uno de los mejores. Todo empezó en 2005 cuando el propio Andrea va a cenar a Don Giovanni, aquí consigue el traspaso del local y se aventura en este nuevo proyecto. Dos Soles Repsol, varias veces mejor restaurante italiano… Es un lugar, a dos pasos del Retiro, que apenas necesita presentación.
Paseo de la Reina Cristina, 23.
Barcelona
Xemei
No hay duda de que Xemei es uno de los mejores italianos de la ciudad. Conseguir sitio en una de sus pocas mesas es algo extraordinario. Si se consigue, hay que dejarse aconsejar. No es un italiano cualquiera, es una carta basada en la gastronomía veneciana. De esto se encargan sus fundadores, dos hermanos gemelos. ¿Su carta? Bigoli en salsa veneciana -con anchoas y cebolla dulce-, spaghetti chitarra con tomate y albahaca, risotto con parmesano, naranja y cardamomo…
Paseo de la Exposición, 85.
Il Giardinetto
El restaurante Il Giardinetto es un clásico en Barcelona desde 1974. Uno de esos restaurantes italianos que sigue estando de moda mucho tiempo después. Sus paredes verdes, sus manteles blancos y su pasta de siempre no fallan. Por eso es uno de los italianos de referencia en la Ciudad Condal. Por él han pasado escritores, periodistas, cantantes, actores… Hasta la jet de la ciudad cena allí los viernes. Todo el mundo conoce Il Giardinetto y sus pastas.
Calle de la Granada del Penedés, 28.
Bacaro
Terminamos la selección en Barcelona con Bacaro, otro restaurante veneciano. Se encuentra justo detrás de la Boquería, y muchos lo aclaman como uno de los mejores lugares de la ciudad para disfrutar de buena gastronomía italiana. Una carta con platos interesantes y bien hechos con los que viajar a Italia con el paladar: tagliatella con ragú de gallo pata negra, passatelli con setas de temporada, gnocchi con pesto de rúcula y ricotta salada, bacalao mantecato, hígado de ternera alla veneciana con puré de patatas… La carta de vinos no es puramente italiana pero sí en un porcentaje muy alto.
Calle de Jerusalén, 6.
