Todo lo que necesitas saber sobre las tetinas

A la hora de poder alimentar adecuadamente a tu bebé, cuando no le das el pecho o cuando comienzas a trabajar, es importante elegir el mejor biberón. Sí, el que se adapte a su edad y le aporte el mayor número de beneficios. Y eso supone, al mismo tiempo, seleccionar de forma adecuada lo que son las tetinas que utilizará con el citado.

A eso, a seleccionar de manera adecuada la tetina, te vamos a ayudar en la medida que nos es posible. De ahí que, a continuación, te vayamos a dar toda la información que necesitas conocer acerca de ese artículo.

Tetinas según su forma

Varios son los criterios que se utilizan para poder clasificar a las tetinas. No obstante, uno de los más importantes es el que las diferencia en base a su forma. En este caso, hay dos modalidades:

• Anatómicas

  Se adaptan muy bien al paladar del bebé y se caracterizan porque, a la hora de que este realice la succión, adquiere una estructura similar al del pezón materno.

• Redondas

  Se dividen a su vez en tres clases: la de flujo lento, que está pensada para los primeros días de vida del recién nacido; la tres posiciones, que ofrece distintos flujos según cómo la utilice el pequeño, y la de papilla. Esta, como su propio nombre indica, está pensada para que el niño tome papillas y alimentos que resultan más densos.

Tetinas según el material del que están hechas

Si tenemos en cuenta, por otro lado, lo que es el material con el que se han fabricado, básicamente hay dos tipos de tetinas:

• Silicona

  Tienen la ventaja de que no absorben olores, que son muy blandas y que mantienen su forma en todo momento.

• Látex

  Son elásticas y blandas a la par que transparentes y resistentes. Tenemos que subrayar que en contra tienen que se considera que, con el paso del tiempo, se degradan de forma más contundente que las anteriores.

Tetinas según el flujo

De la misma manera, no podemos pasar por alto el hecho de que existen más clasificaciones de las tetinas y una de esas es por el flujo del producto que permiten. En este caso, hay cuatro diferentes modelos:

• De flujo lento

  Como es de imaginar por su nombre, la leche sale muy poco a poco. De ahí que estén especialmente recomendadas para recién nacidos.

• De flujo medio

  Son las que se pueden usar por bebés a partir de tres meses. Son pequeños que ya tienen cierto “manejo” de la alimentación con el biberón.

• De flujo rápido

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  A partir de los seis meses de edad se pueden emplear estas tetinas. Y es que en ese momento ya son capaces de succionar sin problemas y, además, comen ya con cierta contundencia.

• De flujo variable

  Son idóneas para cualquier bebé, independientemente de su edad o de su habilidad succionando. Y es que están dotadas con un sistema que permite regular el citado flujo.

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto, no podemos pasar por alto tampoco que hay otros aspectos que merece la pena conocer sobre las tetinas. Nos estamos refiriendo a los siguientes:

• Si partimos del criterio de la anchura de la boca, se pueden clasificar en las de boca ancha y en las de boca estrecha.
• También hay que tener en consideración que hay tetinas para lo que son papillas y productos más densos como los cereales, al tiempo que las que están recomendadas únicamente para la leche.
• A la venta también existen las llamadas tetinas desechables. Estas son compradas por los padres a la hora de viajar con los niños o de salir fuera de casa. De las mismas hay que destacar que ya están esterilizadas pero, como su propio nombre indica, hay que tirarlas una vez que se les ha dado un uso.
• A la hora de comprar cualquier tetina hay que tener en cuenta todas las clasificaciones que hemos dado hasta el momento. No obstante, no es menos importante fijarse en que los envases de cualquier producto de este tipo se viene a dejar muy claro la edad para la que está recomendado y las características del mismo.
• Jamás hay que adquirir una tetina en un bazar o establecimiento similar. Es un producto lo suficientemente importante para que se adquiera en la farmacia o tiendas especializadas en bebés. De esta manera, se asegura que se esté comprando un producto que ha pasado todos los controles sanitarios y legales establecidos.

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