Hartazgo en La Carolina: manifestaciones y protestas de los vecinos ante la oleada de robos en el pueblo

Los vecinos de La Carolina, un pueblo de Jaén de 15.000 habitantes, han dicho basta. La oleada de robos y la inseguridad que se masca en el municipio desde hace meses ha empujado a los carolinenses a salir a la calle para manifestarse a las puertas de los juzgados. Dicen que tienen miedo y que no pueden dormir tranquilos. La Guardia Civil trabaja a destajo y esta misma semana ha detenido a dos hombres con múltiples delitos a sus espaldas.

Los robos no sólo se producen en viviendas: ha habido saqueos en tiendas, colegios, vehículos… e incluso iglesias. Los vecinos advierten de que está viniendo gente «de fuera» arrastrada por un efecto llamada para cometer más robos.

En las protestas del pasado fin de semana se congregaron comerciantes, hosteleros y vecinos de a pie. El último robo se produjo en la madrugada del sábado. «Me reventaron la puerta de mi imprenta y se llevaron unos 1.000 euros que tenía en la caja registradora», denuncia uno de los vecinos, que tiene su negocio en una de las calles principales del pueblo.

«Creo que me tenían bastante vigilado, porque fue todo muy rápido y muy limpio. Incluso la Guardia Civil se sorprende», relata este vecino a Canal Sur. La denuncia unánime de La Carolina es que no hay consecuencias penales. Los ladrones y atracadores que acaban detenidos pasan por el calabozo y vuelven a la calle en cuestión de horas por tratarse de robos menores. Otra de las vecinas presentes en la manifestación tiene dos cafeterías. La pasada semana robaron en las dos, una en pleno día y otra de madrugada. La única duda de los vecinos es saber quién será la siguiente víctima.

El alcalde de La Carolina, Cristóbal Pérez, que viene denunciando el recorte de agentes por parte del Ministerio del Interior, ha agradecido la respuesta pacífica de sus vecinos: «Gracias a todos los carolinenses que han asistido a la convocatoria de la asociación de comerciantes por su civismo y respeto», ha señalado en un vídeo. También pide dotar de mecanismos a los jueces para que puedan enviar a prisión a los responsables.

Dos robos en iglesias y «alarma social»

El pasado viernes, la Guardia Civil detuvo a dos hombres de 32 y 36 años, vecinos del municipio, como presuntos autores de múltiples delitos, entre ellos robos con fuerza, robos con violencia e intimidación, amenazas, lesiones, daños y tenencia ilícita de armas. En el momento del arresto, uno de ellos portaba un cuchillo de grandes dimensiones, y en uno de los registros domiciliarios los agentes encontraron un cañón de escopeta de caza robado y modificado de manera artesanal. También se incautaron cartuchos de escopeta calibre 16 mm, una pistola simulada y otra modificada para disparar munición del calibre 22 mm. Debido a sus múltiples antecedentes y actos vandálicos previos, el juez, esta vez sí, ha podido ordenar su ingreso en prisión.

A principios de marzo, la Guardia Civil arrestó a un hombre de 36 años, vecino de la localidad, como presunto autor de seis delitos de robo con fuerza y un delito de hurto en diversos establecimientos del pueblo. El ladrón forzaba los accesos de los comercios con una llave de grifa, y una vez accedía a su interior, forzaba la parte frontal de máquinas tragaperras, de tabaco y expendedoras, y se llevaba su contenido.

En enero, la Guardia Civil detuvo a tres personas de entre 37 y 40 años, también vecinos de La Carolina, como presuntos autores de robos en vehículos y en dos iglesias del municipio. Los arrestados sustraían tarjetas bancarias de coches y luego las usaban para realizar compras varias. También se llevaron diverso material electrónico de la parroquia de San Juan de la Cruz y, cinco días después, la recaudación que se guardaba en el cajón del lampadario de la iglesia de la Inmaculada Concepción. Según destacó la Benemérita, estos tres ladrones habían generado «alarma social» entre los vecinos. A todos ellos les constaban numerosos antecedentes por hechos delictivos similares.

Además, a finales del año pasado la Guardia Civil arrestó a tres vecinos de entre 36 y 32 años acusados de protagonizar hasta 35 robos con violencia e intimidación en vehículos y establecimientos de La Carolina. En los registros de sus viviendas se intervinieron numerosos efectos reconocidos por los denunciantes, una escopeta de caza y una pistola manipulada del calibre 8 mm.

También a finales de 2024 la Guardia Civil detuvo a tres personas por perpetrar 14 robos con fuerza y hurtos en viviendas, comercios y vehículos de La Carolina y de los municipios vecinos de Vilches y Guarromán. El cabecilla, que solía actuar en solitario y otras veces con el resto del grupo, era un hombre de 36 años que vive en La Carolina y que cuenta con un amplio historial delictivo por hechos similares.