Tuvalu, la nación insular en desaparición, crea su gemelo digital para seguir existiendo

• Antonio Quilis Sanz @AntonioQuilis
• Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.
• • 03/12/2024 06:15
  • Actualizado: 03/12/2024 06:15

Tuvalu, el país insular ubicado en el Pacífico Sur, está recreando su realidad en el metaverso ante su más que posible desaparición por la subida del nivel del mar, convirtiéndose en una nación digital.

La pequeña nación insular en el Pacífico está recreando digitalmente desde sus casas hasta sus árboles, mientras se esfuerza por salvar lo que pueda, mientras se esfuerza a un futuro incierto.

Tuvalu es un pequeño país formado por nueve islas de coral, que se enfrenta a un futuro en el que tal vez ya no sea habitable al toparse con el aumento del nivel del mar causado por el cambio climático que está devorando y erosionando sus costas y que podría no ser habitable.

Desaparición en 2050

Según una evaluación reciente de los científicos de la NASA, gran parte del territorio de Tuvalu, incluida su infraestructura crítica, se encontrará por debajo del nivel de la marea alta actual en 2050.

En todos los escenarios climáticos, el país experimentará más de 100 días de inundaciones cada año para finales de este siglo. Además, hay otros impactos que se deben tener en cuenta, como la intrusión de agua salada, las olas de calor y la intensificación de los ciclones.

Desde la web oficial del país se alerta de que el país, sus nueve islas se enfrentan «a un desafío imposible».  El gobierno explica que «al ritmo actual de aumento del nivel del mar, todo el país quedará sumergido en cuestión de décadas. El agua del mar ya se está filtrando a través del suelo, matando cultivos y estropeando el agua potable».

Un futuro sin tierra

Con este panorama, el gobierno, a medida que el océano se acerca, se pregunta abiertamente «¿qué le sucede a un país sin tierra?», un territorio que quedará bajo las aguas y se enfrenta a perder su territorio físico, y a la «pérdida de sus derechos como nación», por lo que, al desaparecer del mapa perdería «su soberanía debido al cambio climático», creando un problema de identidad.

De este modo, ante la más que probable desaparición, anunció que se convertiría en la primera nación digital, recreando digitalmente su territorio, archivando su rica historia y cultura y trasladando todas sus funciones gubernamentales al metaverso.

Según se espera con esta solución atípica, esta transformación digital permitirá a Tuvalu conservar su identidad y seguir funcionando como Estado, incluso después de que haya perdido su territorio físico.

Diáspora digital

También facilitará la gobernanza de la diáspora tuvaluana al crear un espacio virtual en el que sus nacionales puedan conectarse entre sí, explorar su ascendencia y cultura, y acceder a nuevas oportunidades de negocios y comercio en diversas industrias.

Además, «una réplica digital permanente de Tuvalu ayudará en la lucha por la soberanía continuada en virtud del derecho internacional», afirma su gobierno. Sus gobernantes esperan que esta réplica virtual preserve la belleza y la cultura de la nación, así como los derechos legales de sus 11.000 ciudadanos, para las generaciones futuras.

De momento, Tuvalu también ha formalizado acuerdos con otros países, habiendo firmado ya 12 comunicados conjuntos que reconocen la soberanía permanente de Tuvalu con Bahamas, Islas Cook, Gabón, República de Kosovo, Islas Marshall, Niue, Palau, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, Taiwán, Vanuatu y Venezuela.

Gobernanza digital

Explican que esta transformación digital permitirá a Tuvalu conservar su identidad y seguir funcionando como Estado, incluso después de que haya perdido su territorio físico y servirá de modelo a otros países que se enfrentan a una situación similar.

Este gemelo digital pretende también facilitar la gobernanza de la diáspora tuvaluana al crear un espacio virtual donde los tuvaluanos puedan conectarse entre sí, explorar su ascendencia y cultura, y acceder a nuevas oportunidades de negocios y comercio en diversas industrias.

Además, esta réplica digital permanente de Tuvalu ayudará en la lucha por la soberanía continuada en virtud del derecho internacional y en la creación de un nuevo modelo de estado, que ya ha consagrado en su propia constitución su nuevo modelo de estado.

Migración a Australia

Hasta ahora se habla de los derechos físicos, del territorio, pero, ¿qué va a pasar con sus miles de habitantes? La solución pasaría por una reubicación masiva de sus ciudadanos.

De momento, la diáspora de Tuvalu a Australia (a unos 5.000 km de distancia) ya se ha convertido en realidad recientemente, tras un tratado de 2023 entre las dos naciones que permite la migración de 280 tuvaluanos cada año.

Con este acuerdo se les otorgarán nuevas visas que les permitirán vivir, trabajar y estudiar en Australia, con vías para obtener la ciudadanía. Tuvalu lleva décadas abogando activamente por la adopción de medidas globales para hacer frente al cambio climático que les toca de lleno.

Tanto que fue uno de los países que se levantaron de la mesa de negociaciones durante la COP29 junto con otros miembros de la Alianza de Pequeños Estados Insulares, por graves discrepancias con el rumbo de las negociaciones.

Mientras tanto, desde esta nación insular, claman: «Salven a Tuvalu. Salven al mundo. Exijan a sus líderes que tomen medidas contra el cambio climático».