La dieta que acaba con la retención de líquidos en 24 horas

Los desechos que el organismo no puede eliminar representan hasta dos kilos de peso corporal. La dieta que acaba con la retención de líquidos en 24 horas te permitirá deshacerte de estos líquidos en solamente un día, lo que hará que te veas y te sientas mejor. ¿De qué se trata ese régimen alimenticio especial?

Lo primero que deberías saber es que este trastorno es particularmente molesto en el verano, por lo que es mejor que sepas cómo superarlo cuanto antes.

¿Por qué hacer dieta contra la retención de líquidos?

La Fundación del Corazón explica que «el edema, conocido popularmente como retención de líquidos, es un aumento en el volumen del líquido intersticial». Definido como «una acumulación excesiva de líquidos en los tejidos», sus causas son variadas.

Algunas de las más comunes son los problemas circulatorios, insuficiencia cardiaca congestiva, enfermedades renales o hepáticas. Luego está el edema cíclico idiopático, en el que se produce sin ninguna causa aparente.

Estos mismos profesionales enumeran algunos de los síntomas del edema, como «el aumento de peso inexplicable, la hinchazón en las piernas y en los tobillos, el aumento del perímetro abdominal y la presencia de fóvea -el hundimiento de la piel que persiste durante varios segundos al ser presionada con los dedos-«.

Para combatir los síntomas y la retención de líquidos se debe adoptar una dieta baja en sodio. Recuerda que las principales fuentes de sodio son la sal de mesa, los alimentos con alto contenido de sodio y el agua, por lo que deberías reducir tu ingesta de todos ellos.

La sal y el sodio «atraen» el agua que consumes. Eso significa que, si te preocupas por comer saludable y beber dos litros de agua, una ingesta elevada de sal no hará más que aumentar la retención de líquidos.

Hacer dieta contra la retención de líquidos es importante porque una de las consecuencias de los edemas son los problemas circulatorios. A su vez, éstos provocan 1 de cada 4 defunciones al año en España, según informa el Instituto Nacional de Estadística. De hecho, es el primer factor de riesgo en adultos.

Más allá de eso, no debe confundirse la retención de líquidos con obesidad. Aún las personas más delgadas pueden sufrir retención de líquidos toda su vida.

Para reducirlo, todo lo que debes hacer es realizar algunos cambios en la alimentación para que el metabolismo filtre la sal y logre eliminarla poco a poco a través de la orina. Sumado a eso, se debería entrenar al menos un par de veces a la semana. La vida sedentaria que llevamos no hace más que favorecer la retención de líquidos.

Así es la dieta contra la retención de líquidos

A fin de reducir la ingesta de sal, hay que sustituirla con ingredientes que aportan sabor a las comidas pero que no tienen grandes contraindicaciones. Podemos citar algunos como la menta, el perejil, el tomillo, la cúrcuma y la pimienta. Es esencial que comas muchos vegetales, sobre todo verduras, ya que aportan abundantes cantidades de agua. Esto ayuda al correcto funcionamiento de los riñones, y a la formación de la orina para su posterior eliminación.

Por otro lado, debes basar tu consumo de proteínas en pescados, mariscos y carne magra. Deja de lado las carnes ultraprocesadas y los embutidos, que suelen tener sal añadida durante el proceso de elaboración.

Si vas a comer lácteos, que sean de bajo porcentaje de grasa; y dale protagonismo en tu dieta tanto a las conservas -revisa bien el sodio- como a los frutos secos. Esta combinación de alimentos sin sal y diuréticos contribuyen a que generemos mucha más orina.

En cuanto a las frutas, hay varias que destacan por su efecto diurético: la piña, el pomelo y los arándanos. Entre las verduras, cabe mencionar el apio, los berros, las berenjenas y los espárragos.

Como habrás visto, las indicaciones son prácticamente iguales que si buscas bajar de peso o llevar un estilo de vida más sano.

Dieta contra la retención de líquidos de 24 horas

Si a pesar de estas sugerencias no sabes cómo organizar tu dieta contra la retención de líquidos para obtener resultados en sólo 24 horas, vamos a detallar una propuesta que incluye las comidas que no debes saltarte. Lo más interesante de todo es que de seguro tienes la mayoría de los alimentos y productos en casa.

Igualmente pregunta a la dietista o al médico porque son los que deben diseñar esta dieta para ti, pues no todos los cuerpos son iguales ni cuentan con las mismas necesidades.

Desayuno

Come un lácteo, que puede ser un vaso de leche o un yogur, y acompáñalo con una taza de café sin azúcar, una pieza de fruta y una ración de pan integral. Transcurridas un par de horas, a media mañana, puedes beber un segundo café sin azúcar y servirte otra fruta o, por qué no, comer un puñado de frutos secos.

Almuerzo

Cocina unas verduras de color verde o amarillas, ya sea cocidas o rehogadas, y acompáñalas con una porción de proteína -pescados, mariscos o carnes-. ¿Tienes hambre? Cocina uno o dos huevos. Si no has comido pan por la mañana, puedes comerlo ahora. Asegúrate, eso sí, que siempre sea pan 100% integral.

Merienda

Repite la fórmula del desayuno. En verano, puedes disfrutar un batido o un licuado y echarle unos cubos de hielo para regular tu temperatura corporal.

Y hasta la fruta fresca será fantástica para reducir ese efecto saciante que tienen y que siempre quieres suplir con otros alimentos nada sanos.

Cena

Como en el almuerzo, combate la retención de líquidos con medio plato de vegetales de colores, una porción de carne magra y algún carbohidrato como las pastas integrales o el arroz.

En general, la dieta debe ser ligera, sin grandes comidas, con alguna pieza de fruta, legumbre y porción pequeña de carne o pescado.

Un yogur o un vaso de leche completan la cena que debe tomarse al menos unas dos horas antes de ir a dormir y descansar para hacer una buena digestión.

Si cumples con todo ello , y además lo combinas con ejercicio diario entonces es fácil y factible que la rentención de líquidos se vaya.

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