Los rasgos que tienen las personas que amontonan ropa en la silla, según los psicólogos

Llega a España el 'puttering', la filosofía que te hace alcanzar la felicidad en casa

Muchas personas, al llegar a casa después de un largo día o al cambiarse de ropa, tienen la costumbre de dejar la ropa en la silla. Esta, que comienza vacía y funcional, rápidamente se convierte en un punto de acumulación que refleja más de lo que parece. Aunque muchas veces se trata de ropa limpia, que solo ha sido usada brevemente o está «demasiado limpia para lavar, pero demasiado sucia para guardar», la realidad es que no termina ni en el armario ni en el cesto. Este hábito aparentemente inofensivo puede tener consecuencias sobre el orden personal, la salud mental y el estado emocional de quien lo practica.

Según Cortada Psicólogos, el orden “es una de las grandes virtudes del ser humano, y como toda virtud se adquiere y se trabaja a base de dedicación, tiempo y paciencia. Ser ordenado no es una acción mecánica, sino libre”. La acumulación de ropa en la silla no suele ser una simple cuestión de pereza. A menudo está relacionada con factores psicológicos como la fatiga mental, la procrastinación o la necesidad de mantener cierto control en medio del caos diario. Para algunas personas, dejar ropa fuera del armario crea una ilusión de accesibilidad o eficiencia; para otras, es una manifestación de desorganización temporal provocada por el estrés, la ansiedad o el cansancio crónico. Identificar la causa específica es clave para corregir el hábito sin culpa, mediante estrategias como establecer rutinas claras, reducir el número de prendas en uso y mantener un entorno minimalista que favorezca el orden natural.

¿Por qué acumulamos ropa en la silla?

Existen varias causas detrás de este comportamiento, que van desde lo práctico hasta lo emocional. Algunas de las más comunes incluyen:

Falta de tiempo

Muchas personas viven con rutinas aceleradas y sienten que guardar la ropa toma demasiado tiempo, especialmente si no está completamente limpia o planchada.

Ropa “a medio uso”

A menudo se trata de prendas que han sido usadas solo unas horas y no se consideran lo suficientemente sucias para lavar, pero tampoco lo bastante limpias para guardar.

Fatiga o cansancio

Después de un día agotador, doblar y guardar ropa puede parecer una tarea innecesaria o pesada.

Evitar tomar decisiones

Decidir dónde guardar la ropa, si lavarla o no, puede convertirse en una carga mental más. Posponer la decisión lleva a acumularla.

Falta de organización en el armario

Cuando el armario está desordenado o saturado, es más fácil dejar la ropa a la vista que hacer espacio.

Hábito inconsciente

Con el tiempo, acumular ropa en la silla se vuelve parte de la rutina diaria sin una reflexión consciente sobre ello.

Los rasgos de la personalidad vinculados al hábito de acumular ropa

Desde una perspectiva psicológica, ciertas características de personalidad pueden hacer que una persona sea más propensa a este tipo de comportamiento. Las características más comunes en quienes acumulan ropa en la silla incluyen:

La procrastinación

La tendencia a dejar las cosas para después también se refleja en pequeñas tareas domésticas como guardar la ropa.

El perfeccionismo

Paradójicamente, algunas personas perfeccionistas evitan guardar la ropa si no está perfectamente doblada o clasificada, lo cual los lleva a postergar la tarea.

Cansancio emocional o mental

Cuando la mente está saturada, tareas como organizar ropa pierden prioridad frente a otras urgencias.

Tendencia al desorden

Algunas personas simplemente son más desorganizadas y no perciben la acumulación como un problema.

Sensibilidad al estrés

En momentos de ansiedad o estrés, el orden del entorno puede deteriorarse, y la silla se convierte en un símbolo de “lo pendiente”.

Apego emocional a la rutina

En algunos casos, dejar ropa en la silla forma parte de un ritual cotidiano que da cierto consuelo, aunque visualmente representa desorden.

Algunos consejos para evitar acumular ropa en la silla

Si bien este hábito puede parecer difícil de romper, hay estrategias prácticas y psicológicas que pueden ayudar a mantener el armario ordenado y evitar la acumulación. Algunas recomendaciones efectivas son:

 

Salir de la versión móvil