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Las personas contamos con una configuración genética que se encuentra determinada por nuestro ADN. Sin embargo, hay movimientos, habilidades y comportamientos que se presentan a partir de la práctica y el ensayo. Una de las condiciones que se disputa entre estas dos variables es la capacidad de mover y curvar la lengua en diferentes posiciones. ¿Qué pasa si lo haces y qué dicen los expertos sobre tu inteligencia? Las funciones que cumple dicho músculo y su importancia en el cuidado de nuestro organismo.
La Clínica Cloux comenta que el sistema estomatognático tiene mucho que ver para comprender qué quiere decir curvar la lengua. Dicho sistema se refiere al conjunto de estructuras destinado a cumplir las funciones de masticación, succión, deglución y fonación. Por lo tanto, para abordar dicho movimiento que pueden realizar algunas personas con su lengua, sugieren que primero tenemos que hablar de lo que significan los cambios en el sistema estomatognático configurado por las estructuras óseas y musculares que permiten las funciones de hablar, comer, respirar, masticar y succionar. «La lengua es un órgano muy importante dentro de este sistema. Nos permite realizar todas las funciones anteriormente mencionadas. Además, la lengua interviene de manera directa con el desarrollo del maxilar, la mandíbula, el paladar y los dientes», explican profesionales de la clínica. A su vez, advierten que una posición incorrecta de dicho órgano puede resultar en una serie de consecuencias como malformaciones de piezas o apiñamiento dental.
¿Cómo explica la ciencia el movimiento de curvar la lengua?
Según la Universidad de Delawere, existe una tendencia muy marcada en relación a la población que puede realizar el movimiento de curvar la lengua y quienes no lo logran. Entre los factores de análisis, los que adquieren mayor relevancia son las configuraciones genéticas y la destreza y habilidad motriz a través de la práctica.
«La proporción de personas que pueden enrollar la lengua varía entre el 65 y el 81%, con una proporción ligeramente mayor de enrolladores de lengua en mujeres que en hombres», detallan miembros de la institución académica.
En este sentido, es frecuente que los niños no logren enrollar la lengua en el primer intento. Pero, sin embargo, luego de una serie de intentos y pruebas, adquieren la técnica y habilidad necesaria para curvar la lengua.
De esta manera, que algunas personas aprendan a hacerlo después de ser incapaces de generar mayor evidencia en la tendencia de que curvar la lengua, pues no se trata de un simple carácter genético si no de una habilidad adquirida y ejercitada.
Los rasgos físicos, psicológicos e intelectuales de curvar la lengua
Al indagar qué quiere decir curvar la lengua, pueden encontrarse diferentes perspectivas de análisis que explican el movimiento. Uno de ellos es fisiológico y sostiene que doblar la lengua requiere una flexibilidad física en los músculos del órgano.
Además del punto fisiológico, existen tendencias que relacionan curvar la lengua con factores de la personalidad y las capacidades cognitivas. En este sentido, indican que realizar dicha acción es una señal que evidencia un alto grado de control motor y coordinación.
También se mencionan conexiones con el desarrollo cognitivo e intelectual de las personas que logran curvar la lengua por su capacidad de control y destreza corporal. Es una habilidad que expresa y representa rasgos de una personalidad más extrovertida, ingeniosa, hábil y segura de sí misma.
¿Cuáles son las funciones de la lengua?
El análisis sobre qué quiere decir curvar la lengua requiere, a su vez, de comprender las funciones que cumple uno de los órganos más importantes del cuerpo humano. La Clínica Birbe detalla cada una de ellas.
Una de las más importantes es el sentido del gusto. En nuestro cuerpo existen glándulas que reaccionan a los productos químicos del alimento que consumes. Por lo tanto, se produce el sabor, que es una reacción de defensa que trata de evitar cualquier sustancia que pueda ser perjudicial.
Otra de las funciones el trabajo de sensibilidad y colaborar con el proceso de trituración de la comida. Los profesionales de la clínica explican que el dorso y el paladar son las partes de la lengua que influyen en la masticación.
¿Qué otras acciones permiten la lengua?
La comunicación oral es una práctica individual y social que nos permite relacionarnos entre las personas de la comunidad. La lengua es imprescindible en la pronunciación de las palabras.
Además del trabajo de registrar sabores y favorecer la alimentación, la posición de la lengua determina el paso del aire y puede crear sonidos gracias al papel de las cuerdas vocales, que también son importantes y necesarias en este aspecto. A su vez, la lengua puede actuar como vía para absorber y realizar funciones de defensa a través de la formación de anticuerpos.
En conclusión, curvar la lengua es una habilidad que puedes ejercitar y representa un desarrollo potencial de condiciones físicas e intelectuales.