Ni nadar ni pilates: el mejor ejercicio de bajo impacto para los mayores de 60 con problemas en las rodillas

Bailar fortalece los músculos, mejora el corazón, protege las rodillas y eleva el ánimo de las personas mayores

Actividad, deporte, entrenamiento

Una persona mayor en natación.

A medida que avanza la edad, mantenerse activo es esencial. Sin embargo, no todos los ejercicios son adecuados para quienes ya comienzan a notar el desgaste de sus articulaciones, especialmente las rodillas.

Encontrar una rutina que combine beneficios cardiovasculares, mejora muscular y protección articular es esencial para envejecer con buena calidad de vida. Y aunque muchas personas piensan en disciplinas como la natación o el pilates, hay un ejercicio de bajo impacto igual de eficaz.

El ejercicio de bajo impacto perfecto para cuidar las rodillas y mantenerse en forma

Bailar es una de las mejores formas de ejercicio de bajo impacto para personas mayores de 60 años, especialmente aquellas con problemas en las rodillas. Su capacidad para activar distintos grupos musculares sin exigir un esfuerzo demasiado agresivo lo convierte en una opción ideal.

Según informa Tatiana Bojacá García, terapeuta física de los Centros Médicos Colmédica, este tipo de actividad ejercita diferentes músculos del cuerpo y mejora la condición física. Además, proporciona vitalidad y diversos. «A su vez, al estar en constante movimiento, permite elevar el ritmo cardíaco, reduciendo los riesgos de sufrir presión arterial alta y previniendo enfermedades asociadas al corazón», añade la especialista.

Además, bailar puede adaptarse a numerosos niveles de capacidad física, desde sesiones suaves al ritmo del bolero hasta clases más dinámicas como zumba para mayores. Esta flexibilidad lo hace accesible y personalizable, fomentando la constancia y reduciendo el riesgo de abandono.

Alternativas de bajo impacto igual de efectivas para personas mayores de 60 años

Aunque el baile se presenta como una opción destacada, no es la única. Existen otras prácticas que ofrecen beneficios similares. Éstas son algunas de ellas:

Consejos para integrar el ejercicio físico con seguridad

La doctora Bojacá insiste en la importancia de comenzar de forma progresiva, respetando los límites del cuerpo y buscando siempre la ayuda de un profesional. Establecer horarios, usar ropa adecuada, mantener un ritmo respiratorio constante y combinar el ejercicio con una alimentación equilibrada son factores determinantes para mantener la práctica en el tiempo.

Por qué los ejercicios de bajo impacto mejoran la calidad de vida

Además de cuidar las articulaciones, este tipo de actividad fortalece el sistema cardiopulmonar, mejora la movilidad general y ayuda a controlar el peso. Su práctica regular también repercute positivamente en el estado de ánimo y en la prevención de enfermedades crónicas.

Mantenerse activo después de los 60 años es posible y muy recomendable. Actividades como bailar, caminar o nadar ofrecen numerosos beneficios físicos y emocionales. Elegir ejercicios de bajo impacto permite cuidar las rodillas, fortalecer el cuerpo y mejorar la calidad de vida.

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