4 pistas gastro en Valencia (más allá del arroz)
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Valencia está de fiesta. Arranca su Semana Grande de Fallas 2017, la primera como Patrimonio de la Humanidad, y se prepara para acoger a un aluvión de turistas curiosos por descubrir una de nuestras celebraciones más internacionales. Turistas que, sin necesidad de bola de cristal, nos aventuramos a adivinar que entre ninots y mascletàs buscarán hueco para rendirse a la extraordinaria cocina local que ofrece la ciudad del Turia.
Dejando de lado la icónica paella, así como otros arroces que nada tienen que envidiarle, Valencia viaja mucho más allá de lo que ofrece la Albufera en su actual oferta gastronómica. Se siente efervescente, mestiza y creativa. Abanderada por grandes chefs y revitalizada con jóvenes proyectos cargados de impulso y buen hacer. ¿Los descubrimos?
Central Bar by Ricard Camarena
Mercat Central, el mercado modernista más grande de Europa, es uno de los lugares de obligada visita cuando uno pasa por Valencia. Y más cuando descubres que dentro hay una barra de cocina de mercado, fresca y de toques street food firmada por el reconocido cocinero local Ricard Camarena. Entre zapateros, verduras de la huerta levantina o garrofones a granel, y ambientado con el habitual bullicio de una mercado de abastos, se encuentra la barra de Central Bar. ¿Sobre ella? Una ensaladilla riquísima, boquerones marinados con ceviche de fruta de la pasión, sugerencias del día que se recogen en una pizarra o unos bocadillos que se han convertido en uno de sus grandes reclamos.
Doña Petrona
La última aventura gastronómica de Carito Lourenço y Germán Carrizo en el barrio de Ruzafa. Esta pareja de argentinos, que está dando mucho que hablar con sus asesorías culinarias y su Fierro -un espacio gastronómico con una única mesa de 12, solo disponible las noches de viernes y sábado- sigue su camino con Doña Petrona. Se trata de un refugio de sabores de su tierra, populares pero bien entendidos, con platos como la milanesa con puré, empanada mendocina o chorizo criollo con pamarola. Combinados, también, con guiños locales como el pulpo con chirivía y garrofó o la ensalada de patata, sepia y alioli.
Rausell
Las patatas bravas son un clásico que encontrarás en numerosas cartas y pizarras de Valencia. También en los reseñados Central Bar y Doña Petrona. Sin embargo, nos quedamos con Rausell porque es una de esas barras con solera que tanto emocionan y sus bravas (de fritura impecable, con buen alioli y buen pimentón) siempre ocupan los puestos destacados allá donde hay un ranking. La que es una de las direcciones favoritas de la Infanta Elena cuando visita la ciudad, destaca no solo por esta receta sino por su respeto al producto, sus mariscos, traducido en buenas tapas y raciones.
La Más Bonita
Un atardecer frente al mar, vigas de madera, blanco, azul… La Más Bonita es uno de esos rincones que cuesta compartir porque querrías que siempre hubiera sitio en su terraza. Un espacio amable, mediterráneo y sencillo donde empezar el día con un batido eco, disfrutar a lo largo de la jornada de una carta casera con platos divertidos como hummus, sándwiches o ensaladas. Tienen una selección de opciones para veganos, un patio encantador, deliciosas tartas home made y combinados con sin alcohol que harán de la transición entre la playa y la noche un ritual irremediablemente hedonista.