Las lágrimas de Letizia, protagonistas de su look más sobrio en Japón
Los reyes continúan inmersos en su viaje oficial al país nipón y los looks de Letizia siguen acaparando todas las miradas. El último compromiso japonés en la agenda oficial de Doña Letizia tenía como destino un breve recorrido por el Hospital Universitario de Keio, para conocer los avanzados métodos de tratamientos contra el cáncer y las enfermedades raras. Una vez más, la sobriedad y la corrección han sido las grandes protagonistas del outfit real.
Letizia parece no querer llamar mucho la atención en esta visita de Estado. Para su ruta por el centro sanitario, la reina se volvió a decantar por la sencillez, con una camisa en crudo reciclada entallada, plisada y manga francesa, combinada con una falta tubo de punto y print amarmolado, que ha acompañado por unos stilettos negros y una cartera de piel en el mismo color. El auténtico protagonista del sobrio look de la reina han sido unos llamativos pendientes de piedra de luna en forma de lágrima firmados por Tous, que ya ha lucido en ocasiones anteriores.
Para poner rumbo a su ruta por el país del sol naciente, la reina se decantó por la prenda de entretiempo por excelencia, el trench; apostó todo al rojo con un abrigo carmín y un vestido de terciopelo de su diseñador de cabecera, Felipe Varela, para la ceremonia de bienvenida en el Palacio Imperial de Tokio (y pendientes pertenecientes a un conjunto de la Reina Sofía); y volvió a recurrir al modisto madrileño con un impresionante diseño azul noche realizado en tul con bordados de hojas en hilo y cristal marino, que ya estrenó durante la visita que realizó a España el que fuera presidente de Perú, Ollanta Huma, que acompañó con una tiara del joyero oficial y un brazalete de Cartier para el plato fuerte del viaje de Estado.
No cabe duda de que la reina no está apostando todo, estilísticamente hablando, en su viaje de Estado por el país nipón. Letizia, en una línea de máxima corrección y mínimo atrevimiento, está recurriendo a looks reciclados para apuestas seguras. La monarca parece estar reservando la artillería pesada para futuros compromisos oficiales (y el duelo royal más esperado).