Jesús Vidal: la historia de superación detrás de su Premio Goya
El ganador del Premio Goya a Mejor Actor Revelación solo tiene un 10% de visión y su discurso por la integridad ha sido lo más aplaudido de la gran noche del cine español
Jesús Vidal se convirtió, por méritos propios, en el protagonista absoluto de la gala de los Premios Goya que se celebró el sábado. No solo por el hecho de ser la primera persona con discapacidad en obtener un reconocimiento de tal envergadura en el mundo del arte de nuestro país sino también por el emotivo y reivindicativo discurso que pronunció. Unas palabras que casi dos días después siguen emocionando y que han corrido como la pólvora en las redes sociales. Pero ¿quién es Jesús Vidal?
El actor revelación del año nació en León hace 43 años y, aunque estudió la carrera de filología, su pasión por el mundo de la información le llevó a hacer un máster en periodismo, habiendo hecho las prácticas de dicho posgrado en la Agencia EFE y en la versión online del Diario de León.
Aunque ‘Campeones’ ha sido su primera película, Jesús es actor y director de teatro y lleva cinco años dedicado íntegramente a la interpretación. La verdadera pasión del premiado es el deporte, concretamente el ciclismo y el baloncesto, hilo conductor del filme con el que ha debutado en el séptimo arte. “Es muy bonito descubrir la competitividad que tienen esas ligas. ‘Campeones’ ha demostrado que ese tipo de deporte también existe. Yo como periodista he seguido mucho la ACB, la NBA y soy muy fan de Draze Petrovic, del baloncesto yugoslavo y del Maccabi Tel Aviv porque sufrió ese rechazo a participar en competiciones», declaró Vidal a la agencia EFE durante la promoción de su película.
La discapacidad de Jesús es visual. Tal y como contaba su hermana María José a la agencia Ical, este galardón es “un reconocimiento a todo su esfuerzo, a su superación y lucha, teniendo en cuenta que es una persona prácticamente ciega, con una visión de apenas un diez por ciento y no hay obstáculo que se le haya puesto por delante”.
“Señores de la Academia, han distinguido a un actor con discapacidad, no saben lo que han hecho. Ahora solo se me ocurren tres palabras: inclusión, diversidad y visibilidad. ¡Qué emoción siento!” fueron las palabras con las que un emocionadísimo Jesús arrancó el discurso que, a fecha de hoy, ya tiene un lugar especial en la historia de los Premios Goya.