El doble drama de Valeria Quer

A pocos días de la celebración del juicio por el asesinato de Diana Quer, su familia vive una complicada situación que se ha conocido a raíz del tenso enfrentamiento entre su madre, Diana López-Pinel, y su hermana, Valeria Quer, a las puertas de los juzgados de Majadahonda. La joven replicaba a su madre la denuncia que había interpuesto contra su padre por una presunta agresión: «¡Mentirosa! Eres una mentirosa, jamás te intentó atropellar». «Si te ha pegado hasta a ti», le contestaba su madre en una terrible escena.

A sus 19 años, Valería se ha visto sumida en una cruel guerra entre sus progenitores cuando aún está luchando por superar la desaparición de su hermana, cuyo rostro lleva tatuado en uno de sus gemelos y a la que recuerda frecuentemente.

Valeria adora a su progenitor y comparte varias imágenes fotos con él en Instagram: «Cuida de quién te cuida. Quiere a quien te sabe querer. El único hombre que se merece mis lágrimas». Sin embargo, con su madre no ha colgado ninguna imagen.

Se autodefine en su perfil como artista inusual y remarca su zodiaco Ares -Dios de la guerra en la mitología griega-para dar una pista sobre su personalidad. Demuestra su pasión por los tatuajes luciendo varios por su cuerpo; también le gustan los piercings y los maquillajes de fantasía. No se le conoce pareja alguna pero si se tuviera que quedar con un amor en su vida sería el de su perro, fiel compañero. De hecho, lo primero que hizo este miércoles tras el enfrentamiento con su madre fue colgar stories en Instagram abrazada al canino.

También publica vistosas fotos propias, no exentas de controversia, así como recuerdos de su hermana: «Un día más es un día menos. Te echo de menos a más no poder. Te amo», publicaba Valeria Quer al lado de una carta que le escribió Diana cuando eran pequeñas. Tampoco falta el férreo apoyo a su padre.