El acuerdo al que han llegado Isabel Jiménez y Álex Cruz tras filtrarse su proceso de separación
Álex Cruz e Isabel Jiménez ha ido tomando decisiones que los desvincula cada vez más
El matrimonio se ha separado tras 16 años casados y dos hijos en común
Después de contraer matrimonio en el año 2009, Álex Cruz e Isabel Jiménez han decidido tomar caminos separados. Se trata de una ex pareja que siempre se ha caracterizado por la discreción en cuanto a su vida privada. Tras filtrarse la ruptura a los medios de comunicación, también se ha descubierto cuál es el acuerdo al que han llegado: no quieren tener nada en común y tanto las empresas como las casas ya figuran a nombre de la presentadora.
La separación ha pillado a todos por sorpresa. Ninguno de ellos ha hecho gala públicamente de su vida en exceso, pero si que han querido compartir con sus seguidores algunos los momentos felices a través de las redes sociales como viajes o cumpleaños con sus hijos. Estas publicaciones mostraban que eran una pareja unida y muy familiar. Todo esto se ha roto cuando han anunciado su ruptura. Después de saltar la noticia de su divorcio y tras investigar acerca de las pertenencias y propiedades que tenían en común, hemos descubierto que desde hace ya varios meses los movimientos administrativos para desvincularse se han venido sucediendo. Estas decisiones dejan patente que no atravesaba un buen momento y, tras acordar separarse, han querido desligarse por completo uno de otro.
El acuerdo de Isabel Jiménez y Álex Cruz
En el año 2015, la entonces pareja creó la empresa Con Alma y Limón S.L. con el fin de dedicarla a gestionar los derechos de imagen de la comunicadora y el desarrollo de su marca personal como personaje público. Una sociedad que en un principio capitaneaban los dos y que ahora ha pasado a ser unipersonal. Isabel Jiménez es la única administradora que figura al frente de ella y Álex Cruz ya no forma parte del entramado societario. Ni siquiera aparece como usuario autorizado de esta entidad.
Por otro lado, el patrimonio inmobiliario no ha quedado exento de movimientos decisivos para los recién separados. Cruz y Jiménez cuentan con dos propiedades. Poseen un chalet con jardín en Madrid, que fue decorado y reconstruido a capricho por el matrimonio, y otro en Almería. Este último, situado en la tierra natal de Isabel, ha sido el refugio familiar durante los meses de verano. Según han afirmado ya varios medios, ambas residencias habrían quedado en su mayoría en manos de la periodista. Por lo tanto, la presentadora podrá seguir disfrutando de estos espacios junto a los dos hijos que tienen en común.
Se trata de unos cambios que han realizado fuera de Madrid para tratar de desviar el foco mediático y no ser descubiertos por la prensa. Unas decisiones que comenzaron a tomarse semanas antes de conocerse la ruptura.
La empresa que creó con su inseparable amiga y compañera de profesión Sara Carbonero, no se ha visto afectada por todos estos cambios, ya que era sólo pertenencia de Isabel Jiménez y la ex mujer de Iker Casillas. Por esto, la firma de ropa de mujer Slowlove continúa su actividad con normalidad.