El Gobierno de Maduro demanda por fraude a la oposición en la recogida de firmas para el revocatorio

ElGobierno bolivariano de Nicolás Maduro ha presentado este lunes una demanda ante el Tribunal Supremo de Justicia por «fraude» en la recolección de firmas por parte de la oposición democrática para activar un referéndum revocatorio contra el presidente de Venezuela, según ha informado un portavoz del mandatario.

«Hemos venido a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia para introducir una demanda con amparo cautelar, para que se cuiden los derechos constitucionales de los venezolanos», dijo a la prensa Jorge Rodríguez, tras entregar el recurso, cuyo alcance se desconoce por ahora.

La Constitución venezolana reconoce el derecho de la oposición a impulsar el referéndum revocatorio. De hecho, en la primera fase necesitaban recabar 180.000 firmas, y lograron más de 10 veces las necesarias, casi dos millones. Pese a ello, la dictadura bolivariana pretende atribuirles un «fraude» en la recolección de las firmas.

Rodríguez, delegado por Maduro para supervisar el proceso con el cual la oposición quiere sacarlo del poder, ha añadido que la querella busca evitar que «sea un fraude brutal perpetrado el que autorice a una organización [política] a cumplir con la siguiente etapa» del revocatorio.

Sin embargo, el portavoz se mostró evasivo al ser interrogado por los periodistas acerca de si la demanda abarca a toda la fase de recolección de firmas o pretende anular el proceso para activar la consulta. «Lo que estamos buscando es que se defienda la Constitución. Esta patraña que montaron […] lo que buscaba era crear un clima suficiente para que la violencia se desatara», respondió Rodríguez.

El pasado viernes, el Consejo Nacional Electoral (CNE) dio luz verde para que la oposición valide 1,3 millones de firmas que ese organismo certificó, de un total de 1,8 millones entregadas a finales de abril para activar el revocatorio. Para activar la consulta se requiere la validación de unas 200.000 rúbricas, proceso que consiste en que el interesado registra además su huella dactilar en una máquina biométrica. Este requisito se cumplirá del 20 al 24 de junio.

Capriles: «No nos dejen solos»

Pocas horas antes, el dirigente de la oposición venezolana, Henrique Capriles, instaba a los gobiernos latinoamericanos a presionar al presidente Maduro para que «respete la Constitución» y pedía la acción del Mercosur y la Unasur, tras entrevistarse este lunes en Asunción con el presidente paraguayo Horacio Cartes.

«Venezuela es un país maravilloso pero necesitamos su ayuda, la de todos nuestros hermanos de la región, para que se respete la Constitución. Pedimos que Mercosur y Unasur exijan a Maduro que respete la Constitución», ha dicho a la prensa.

Según sostiene Capriles, «la situación de Venezuela no es para ser indiferente, no es para despachar este asunto como algo meramente diplomático».

El líder opositor ha enfatizado que «Venezuela está viviendo la peor crisis de su historia», tras alertar sobre una explosión social de imprevisibles consecuencias. «Puede influir en lo que ocurra en Paraguay y todos los países de la región. No nos dejen solos», expresó con vehemencia el exrival de Maduro en las presidenciales de 2013.

Capriles está en plena gira sudamericana para denunciar la situación política de su país. Tras el encuentro con Cartes, Capriles partirá hacia Buenos Aires donde, poco después del mediodía, se entrevistará con el presidente argentino Mauricio Macri a puerta cerrada. Por la tarde partirá hacia Brasil para reunirse con el canciller brasileño José Serra.

Capriles ha defendido que la oposición venezolana no busca con sus visitas a gobiernos extranjeros que éstos intervengan en Venezuela, sino simplemente, «que se exija al gobierno de Maduro que respete la Constitución», reiteró.

El político venezolano ha agradecido al presidente paraguayo Cartes por la postura de su gobierno a favor del respeto de la Constitución y los derechos humanos en Venezuela, exteriorizada en el consejo permanente de la OEA. «Paraguay ha tenido una posición firme, que para nada significa injerencia en los asuntos internos de Venezuela», precisó.