Santos Cerdán: el ‘negociador’ del pacto de Chivite gana peso en el ‘núcleo duro’ de Sánchez

Apunten el nombre de Santos Cerdán. Diputado por Navarra, discreto fontanero del cuartel general del Partido Socialista -al cual se afilió hace ahora veinte años- es uno de los nombres que entran en las quinielas de candidatos a ministros de un eventual Gobierno de Pedro Sánchez. De un tiempo a esta parte, Cerdán ha ido atesorando la confianza del presidente en funciones y se ha confirmado en su ‘núcleo duro’.

Su papel determinante en la investidura de la socialista María Chivite como nueva presidenta de Navarra, así como la correcta gestión de la política interna de Ferraz, por encargo de Sánchez, hacen que su nombre sea uno de los que ganan más enteros para ocupar mayores cotas de poder.

De cara a un hipotético Ejecutivo socialista, fuentes consultadas por OKDIARIO apuntan a que Santos Cerdán podría dirigir la cartera de Fomento -un ministerio de gran perfil político y presupuesto- si, finalmente, el ahora titular, José Luis Ábalos, es designado vicepresidente o  sustituye a Margarita Robles al frente de Defensa, en el caso de que la magistrada sea nombrada nueva presidenta del Consejo General del Poder Judicial.

Cerdán ha sido uno de los dirigentes más fieles al secretario general socialista. Junto a Ábalos y Adriana Lastra, el navarro fue uno de los grandes apoyos del ahora presidente en funciones cuando decidió presentarse a la secretaría general tras su dimisión, en octubre de 2016, acompañándole a algunas de las reuniones mientras ocupaba la secretaria de Organización del PSN.

Tras formar parte de la Ejecutiva regional de los socialistas navarros entre 2004 y 2017, Sánchez le incluyó en su Ejecutiva federal como Secretario Ejecutivo de Coordinación Territorial. Un cargo que compaginó temporalmente con el de portavoz adjunto del grupo parlamentario en el Parlamento de Navarra. Cerdán abandonó la institución hace unos meses para dar el salto al Congreso de los Diputados y ocupar un escaño en el centro del poder.