Puigdemont critica que no le den la nacionalidad a un marroquí que no sabe leer ni escribir en español

El fugado de la Justicia Carles Puigdemont ha salido esta mañana en la red social Twitter a defender a un marroquí al que le han denegado la nacionalidad española porque no sabe leer ni escribir en español pese a llevar 15 años residiendo en el país.

El ex presidente de la Generalitat ha asegurado desde Waterloo que esta noticia le provoca «tristeza e impotencia» y ha apelado a los sentimientos de sus seguidores indicando: «poneos en la piel de este hombre e imaginad que sois vosotros los que os encontráis en su situación. O vuestro padre».

Si fos un esportista d’elit haurien trobat un arrelament indubtable i definitiu. Quanta humiliació ens explica aquesta història. Tristesa i impotència. Poseu-vos a la pell d’aquest home, i imagineu que sou vosaltres els qui us trobeu en la seva situació. O el vostre pare. https://t.co/twU7Siuryk

— Carles Puigdemont (@KRLS) October 2, 2019

Una defensa, la de Puigdemont a este trabajador y padre marroquí, que supone un nuevo desprecio a España y su idioma, que es el castellano, puesto que el conocimiento de la lengua española «no sólo es un deber para los españoles conforme a lo previsto en la Constitución, sino también es un elemento imprescindible para entender que existe integración y adquirir la nacionalidad española», aseguran desde fuentes consultadas para la obtención de la nacionalidad española.

Dictadura lingüística

Las palabras de Puigdemont, además, chocan con los ideales que el propio ex presidente de la Generalitat, su sucesor Quim Torra y su antecesor Jordi Pujol, han perseguido y persiguen para tratar de allanar el camino para la proclamación de su deseada República catalana: la imposición de una lengua, en este caso, el catalán.

Una dictadura lingüística que a día de hoy  adoctrina hasta en los patios de colegio prohibiendo el castellano en los recreos y el comedor e imponiendo el catalán y que, entre otras cuestiones, supone una traba para aquellos que desean opositar en Cataluña pero no pueden acceder a estas pruebas selectivas por no disponer del conocimiento acreditado de catalán.