LE EXIGEN QUE SE ABSTENGA EN TODAS YA

Los fiscales acusan a Dolores Delgado de ocultarles información en las causas contra el Gobierno por el Covid

La Asociación de Fiscales habla de una "situación inédita" en 150 años de historia de la institución

Dolores Delgado
La Fiscal General del Estado, Dolores Delgado. (Foto: Europa Press)

Los fiscales acusan a la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, de oscurantismo y falta de transparencia en las 51 querellas o denuncias contra el Gobierno por la gestión de la crisis del coronavirus. La situación, dicen, alimenta «las sombras de duda» sobre su imparicalidad.

La Asociación de Fiscales (AF), mayoritaria en la carrera, ha remitido este viernes una durísima carta al Teniente Fiscal del Tribunal Supremo, Luis Navajas, a la vista de que la Fiscal General «ha hecho hábito de no contestar a las cuestiones que por esta asociación mayoritaria de Fiscales se le han dirigido». Se refiere a la carta que la AF ya remitió el 15 de julio a la propia Dolores Delgado exigiéndole que dejara clara cuanto antes su abstención en las citadas causas y reclamándole «transparencia e imparcialidad».

Le pedían también que Luis Navajas le sustituyera en todos los casos y que se convocara a la Junta de Fiscales para ser escuchada y establecer un criterio común que no viniera impuesto por Delgado. Pero Delgado ha dado la callada por respuesta.

Los fiscales creen que Delgado les ningunea y hablan de una «situación inédita en 150 años de la institución» y de «hito de  difícil superación» en apenas 5 meses de mandato.

En la carta reiteran que dan «por sentada» la «abstención masiva» de la Fiscal General en las 51 causas que el Tribunal Supremo remitió a la Fiscalía. Dicen que sólo quieren saber «cómo va a articular» esa abstención, «que debió dejarse clara en el mismo momento de la entrada» de las denuncias.

La AF creen que la situación es «inédita en 150 años de historia de la institución» porque recuerdan «es la primera vez (salvo error u omisión por nuestra parte) que el Fiscal General del Estado (FGE) abandonaba el Gobierno el mismo día que se anunciaba su designación para ocupar esta alta instancia y se encontraba aún en posesión del acta de diputada».  Ya, entonces, «se le advirtió del deber de abstención que pesaría en todos aquellos procedimientos en que se ejercitaran acciones contra miembros del gobierno».

Los fiscales señalan que «apenas han transcurrido cinco meses desde su toma de posesión y el número de asuntos que exigen la abstención de la FGE, la importancia cuantitativa y cualitativa de los mismos y la consecuente repercusión mediática también marcan un hito que se nos antoja de difícil superación».

La Asociación de Fiscales  cree que todo ello «contribuye a incrementar la sombra de duda respecto a la imparcialidad que su nombramiento extendió sobre toda la Carrera y se sitúa en las antípodas de la autoproclamada transparencia con la que accedía a la más alta dirección del Ministerio Fiscal».

Los fiscales piden además que se convoque ya a la Junta de Fiscales para ser escuchada en lo relativo a la posición común a adoptar frente a estas querellas contra el Gobierno.  Creen que Delgado también ignora a este órgano consultivo  deliberadamente.

«Observamos con notable preocupación», señalan, «la deriva de la Fiscalía General del Estado a prescindir de la Junta de Fiscales de Sala, a la que se obvia omitiendo su convocatoria y sustrayendo de su deliberación y consulta aquellos extremos que estatutariamente le corresponden, en favor de la Secretaría Técnica». El Jefe de la Secretaría Técnica, Álvaro García Ortiz, es una persona de absoluta confianza de la Fiscal General. Le nombró el mismo día de su toma de posesión.

La AF señala que persistirá en su «firme propósito de no sucumbir al desaliento ante la aparente costumbre de la Fiscal General de Estado, de desatender las peticiones de información que se le dirigen».

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