Si te cambiaste a la tarifa TUR del gas, prepárate para el ‘palo’ que va a venir en el recibo de enero

Más de un millón de españoles se han pasado en el último año del mercado libre a la Tarifa de Último Recurso (TUR) regulada del gas. La razón es que esta tarifa resultaba mucho más barata hasta ahora, debido al límite a su subida establecido por el Gobierno. Pero esta situación está a punto de cambiar.

Como ha adelantado OKDIARIO, la Comisión Europea está presionando a España para que no prorrogue más allá del 31 de diciembre la subvención pública actual que permite dicha tarifa reducida, puesto que cubre la diferencia entre ésta y el precio real del gas en el mercado.

Si finalmente -como es lo habitual- se imponen las tesis de Bruselas, esto implicará una fuerte subida de la tarifa del gas para los clientes de la TUR. Subida que se producirá, además, en el recibo de enero y febrero, el más caro del año al coincidir con los meses de más frío y, por tanto, de mayor consumo de calefacción.

Este golpe se verá suavizado porque los precios del gas en los mercados internacionales están muy por debajo de los que había hace un año, en torno a 50 euros por MW (en 2022 superaban los 100 euros y llegaron a un máximo por encima de 200). Pero como el tope de la TUR lleva en vigor mucho tiempo, el escalón se va a notar en todo caso.

Además, la cotización de la materia prima puede subir perfectamente de aquí a enero, en especial si se cumplen las previsiones de que este invierno en Europa será mucho más frío que el pasado, que fue excepcionalmente templado. A eso hay que sumar la mayor demanda de Asia y las menores exportaciones de Estados Unidos, que se guarda más gas para su consumo interno. Si el precio sube por estos factores, el palo en el primer recibo del gas de 2024 puede ser muy importante.

Volver al mercado libre

En consecuencia, el próximo año puede resultar interesante volver a cambiarse de la TUR al mercado libre, puesto que es muy probable que esta segunda tarifa pase a ser más barata tras el fin del tope de la Tarifa de Último Recurso. A buen seguro, las empresas suministradoras de gas lanzarán ofertas y promociones para que los clientes vuelvan a la tarifa libre.

El Ejecutivo estableció en septiembre de 2021 un techo para la TUR1 y TUR2 -las de consumidores domésticos, una para agua caliente y otra que añade la calefacción- que impedía que el coste del suministro subiera más de un 15% en cada revisión trimestral de la tarifa, lo que equivalía a limitar el alza en el recibo a un máximo de un 5%, aproximadamente. Este tope generó un déficit de tarifa respecto al precio real del gas, que en teoría debían pagar los consumidores en el futuro mediante uno o varios recibos extraordinarios.

Para evitar la probable pérdida de votos, en octubre de 2022 el Gobierno decidió costear el déficit con impuestos a través de los Presupuestos Generales del Estado. Para sufragarlo, dotó una partida extraordinaria de 3.000 millones. Esto ha conseguido una rebaja media de la tarifa del gas para estos consumidores estimada en un 40%.