Porcelanosa sólo puede transportar el 10% de su producción mientras sus costes se cuadruplican

La compañía azulejera Porcelanosa sólo puede transportar el 10% de su producción desde la fábrica a las tiendas o a los puertos para exportarla. «Antes del paro de los transportistas salían de media unos 70 camiones diarios, mientras que ahora salen siete o como mucho diez», asegura Silvestre Segarra, director ejecutivo del grupo español.

En una entrevista con este medio, Segarra explica: «Esta situación nos está afectando gravemente, porque no podemos distribuir la producción». La empresa está teniendo problemas para transportar su mercancía en camiones a las tiendas y en contenedores al puerto de Valencia, desde donde hacen las exportaciones otros países, que suponen en torno al 80% de su negocio. Actualmente, sacar su producción está siendo casi imposible y, por ello, se prevé que sus ventas caigan en picado durante el mes de marzo.

Por otro lado, la compañía no se está viendo afectada por la falta de suministros porque hizo acopio el pasado mes de octubre, ante la escasez de algunos materiales, las subidas de precios y las amenazas de Putin sobre invadir Ucrania. «Tenemos en stock materias primas para seis meses al menos», confirma Segarra.

Respecto al desabastecimiento de algunos materiales y componentes eléctricos, el director ejecutivo de Porcelanosa matiza que están pudiendo solventar la situación gracias al reparto de furgonetas pequeñas.

Los costes se cuadruplican

La compañía azulejera también está acusando el alza de precios de las materias primas, la electricidad, el gas y los combustibles. En concreto, en algunos casos, sus costes se han llegado cuadruplicar en tan sólo unos meses. «Desde el año pasado el coste de la electricidad y el gas nos ha aumentado un 400%», afirma.

Asimismo, añade que también «se ha incrementado el precio de todas la materias primas». Por ejemplo, el precio del metro cuadrado de pavimento y revestimiento ha pasado de 1,5 euros a alcanzar los seis euros, es decir, es cuatro veces más caro.

En cuanto al impacto de la huelga de los transportistas, el directivo explica que es muy complicado hacer una valoración exacta para cuantificar los daños. «El impacto se va a producir en el mes de marzo, no a lo largo del año, y puede que las ventas caigan hasta un 50% en comparación con el mismo mes del año pasado». No obstante, también añade que es muy probable que las ventas se disparen en abril y, en parte, se pueda recuperar lo perdido.

Para concluir, el directivo de Porcelanosa adelanta que cuando se acabe el paro de los camioneros, «el problema va a estar en que todos vamos a tener mucho stock en fábrica y a haber una enorme saturación en la cadena logística».