Fidere, socimi de Blackstone, no venderá sus activos en Madrid pero sí el de Cataluña
Fidere, la socimi filial de Blackstone, forma parte de una telaraña inmobiliaria en la que participan otras socimis cotizadas como Testa, Albirana, Torbel, Euripo o Corona. Entre todas suman una cartera de cerca de 30.000 viviendas repartidas por toda España. Fidere concentra la mayor parte de su actividad en la Comunidad de Madrid donde destacan cinco complejos de alquiler. Se trata de los edificios Sanchinarro, San Sebastian Reyes, Majadahonda e Hispanidad.
La firma ha confirmado a OKDIARIO que en estos momentos no tiene intención de desprenderse de estos activos, todos ellos orientados a un público premium. Los inmuebles están en régimen de alquiler y cuentan con una ocupación del 50%. Fidere asumió la gestión de estos activos a principios de año.
La estrategia que Fidere mantiene en la Comunidad de Madrid es contraria a la de Cataluña, donde apuesta por desinvertir. La socimi ha puesto en venta el edificio Isla Cielo de Barcelona, situado en el Parque Diagonal Mar. Según han confirmado a este periódico, el complejo residencia se vende por unidades, y está gestionado por Anticipa Real State, que ya ha contratado a varios agentes de la propiedad inmobiliaria para conseguir nuevos dueños.
El edificio, que está en venta en varios portales inmobiliarios, fue adquirido en 2014 por Hispania Activos Inmobiliarios a Santander Banif Inmobiliario por 63,8 millones de euros, pagados íntegramente con fondos propios de la antigua Hispania. El complejo residencial de Isla del Cielo consta de dos torres de viviendas con una superficie construida de aproximadamente 38.000 m2.
Los activos de Torrejón
Los inmuebles que Fidere posee en Torrejón de Ardoz (Madrid) han enfrentado a la socimi con los vecinos tras subir los precios del alquiler entre el 80% y el 100%. La medida, comunicada en verano, despertó la indignación de unas 80 familias que se negaron a asumir los nuevos arrendamientos por considerarlos «abusivos».
El Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz también se mostró en contra de la “la actitud” de la socimi cotizada y firmó un texto, -acordado por PP, PSOE y Podemos-, mostrando su apoyo a los vecinos afectados. Además, el consistorio pidió a Fidere que diera facilidades a todos los inquilinos interesados en adquirir sus casas (antiguas viviendas de protección oficial del IVIMA). El conflicto sigue abierto a día de hoy.
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