Diez cifras que demuestran la ausencia de austeridad en el Gobierno de Pedro Sánchez

La desaceleración ha llegado a España para quedarse. E incluso puede empeorar, como muestran la mayoría de los indicadores adelantados. Los desafíos en el exterior son múltiples: Brexit, guerra comercial, pinchazo de la industria alemana.. Y mientras tanto, en España, sigue la incertidumbre política y el Gobierno socialista ha optado por abandonar la austeridad, a pesar de que es más necesaria que nunca en un país con números rojos en la Seguridad Social, con una deuda pública que sigue rozando el 100% del PIB y con un panorama incierto a medio y largo plazo.

A pesar de estos retos que hay por delante, los datos de ejecución presupuestaria de la Intervención General del Estado muestran que en el primer año de Gobierno de Pedro Sánchez en La Moncloa ha vuelto el despilfarro a las arcas públicas, si es que alguna vez se fue. Esto son diez indicadores que lo demuestran:

1. Gastos de personal disparados: +10,4%

Los gastos de personal se han disparado un 10,4% hasta julio en la Administración del Estado, ascendiendo a 9.818 millones de euros, mil millones más que un año antes en los primeros siete meses del año (8.890 millones).

2.La nómina total para pagar a los altos cargos: +5,1%

El dinero destinado a pagar a los altos cargos del Gobierno de Pedro Sánchez ha pasado de los 45,5 millones de euros entre enero y julio de 2018 a 47,8 millones en el mismo periodo de 2019, un crecimiento del 5,1% muy significativo que contrasta con la caída, por ejemplo, de las inversiones, reales del 22,3%, que sí que es un verdadero motor del crecimiento.

3. El gasto en personal eventual se dispara un 26,3%

El Gobierno que presume de querer luchar contra la precariedad ha disparado el gasto en personal eventual del Estado un 26,3% hasta los 30,5 millones de euros hasta julio.

4. Las transferencias a sociedades, entidades públicas empresariales y fundaciones: +40,9%

Muy llamativo es el crecimiento exponencial de las transferencias corrientes a las entidades públicas empresariales, fundaciones y al resto de las entidades del sector público, que ascienden en los primero siete meses del año a casi 1.500 millones de euros y que han crecido un 40,9% en comparación con el mismo periodo del año anterior, teniendo en cuenta tanto los gastos de los presupuestos del año en curso como los de los cerrados.

5. Los gastos de funcionamiento de los ministerios: +37,8%

Los gastos corrientes en bienes y servicios (el gasto de funcionamiento de los ministerios) también se han disparado en lo que va de año un 37,8%, superando en los primeros siete meses los 2.000 millones cuando en el mismo periodo de 2018 no alcanzaba ni 1.500 millones de euros.

6. Gastos de publicaciones: +17,6%

Los gastos de publicaciones del Estado también ha crecido significativamente en lo que va de 2019. Concretamente se han disparado un 17,6%, hasta los 1,8 millones. Esta partida forma parte de los gastos de funcionamiento habituales de los ministerios.

7. El gasto en material y suministros crece un 44,8%

El gasto en «material, suministros y otros» ha ‘engordado’ un 44,8% en los primeros siete meses de 2019. Asciende a 1.659 millones frente a los 1.145 millones que se dedicaban a esta partida en el mismo periodo de 2018.

8. Los incentivos al rendimiento de los funcionarios: +14,4%

Los incentivos al rendimiento de los funcionarios ascendían hasta julio a 426,3 millones solo en el Estado, un 14,4% más que un año antes. Otra cosa es que haya aumentado la productividad real, algo de lo que no suelen difundirse datos.

9. La nómina total de los funcionarios: +10,9%.

El sueldo de los funcionarios del Estado (excluyendo a eventuales o al personal laboral) costaba en total hasta julio de 2018 6.562,3 millones de euros y ahora hay que desembolsar 7.275 millones de euros, un 10,9% más, para hacer frente a esta misma partida.

10. El gasto total crece un 5,9%, más del doble que el PIB

La falta de austeridad se demuestra en que el gasto no financiero crece más del doble que el Producto Interior Bruto, que se está enfrentando a una desaceleración creciente. El gasto no financiero hasta el 31 de julio, según los datos de ejecución presupuestaria repunta a un ritmo del 5,9%, frente al avance del 2,3% de la actividad económica. En total, las operaciones no financieras de gasto ascendían en los primeros siete meses de 2019 a 86.517 millones, casi 5.000 millones más que un año antes.