Faubert se pone chulo: «Le colgué al Real Madrid en la primera llamada»

• OKDIARIO
• 27/03/2020 19:14

Julien Faubert es recordado como uno de los peores fichajes que ha acometido el Real Madrid en su historia reciente. El francés, que llegó al Madrid cedido por el West Ham el 30 de enero de 2009, apenas jugó 52 minutos, aunque dejó una imagen para el recuerdo: su siesta en el banquillo del Bernabéu.

Una década después, Faubert ha explicado en una entrevista para The Athletic cómo se hizo posible su llegada al Real Madrid: «Estábamos en el autobús de camino a Upton Park para jugar contra el Fulham. Recibí una llamada de una persona del Real Madrid y me dijo: ‘Hola, trabajo para el Real Madrid y tenemos que hablar contigo’. Le dije que tenía un partido importante que preparar y que no tenía tiempo para ese tipo de basura», confesó Faubert.

«Apagué mi teléfono, jugamos el partido y luego, volví a encenderlo y vi alrededor de 30 mensajes de texto y 50 mensajes de voz. Fue entonces cuando supe que era serio. Entonces llamé a mi agente y me dijo que teníamos que hablar con el Real Madrid porque estaban en un hotel en Heathrow. Era el último día de la ventana de fichajes y fuimos allí y comenzamos a comerciar», desveló el francés.

«Algunos de mis compañeros se comenzaron a reír»

Faubert describió cómo se tomaron la noticia sus compañeros: «Cuando se hizo el trato, volví a recoger algunas de mis cosas y algunos de mis compañeros comenzaron a reír. Eran bromas como: ‘Julien, ¿te das cuenta de dónde estás?’. Esto es real, maldita sea. Recuerdo que Mark Noble siguió ignorándome y pensé:” Mark, ¿cuál es el problema? “Él dijo: ‘Julien, no puedo hablarte, eres un jugador del Real Madrid. Ya no dependemos de ti’. Hubo muchos chistes».

Por último, el francés se refirió a su famosa siesta en el banquillo durante un encuentro en el Santiago Bernabéu: «Cuando estaba en el banquillo, cerré los ojos durante unos 30 segundos y dijeron ‘este tipo está dormido’. El presidente me dijo que debería tener cuidado, porque hay fotógrafos y cámaras en todas partes. Aprendí mucho de esta experiencia», concluyó Faubert.