El peor Barça en defensa de los últimos 19 años

Luis Enrique tiene un problema que resolver de inmediato. Su equipo hace aguas en la línea defensiva. Si el año pasado sus chicos tardaron nueve jornadas en encajar un gol en Liga, este año esa tendencia ha cambiado hasta el punto de que ya han recibido su primera goleada en el campeonato doméstico, la tercera en toda la temporada.

Sevilla, Athletic y ayer Celta encontraron la forma de hacer cuatro goles al equipo culé en un intervalo de 45 días. En esos tres partidos, Ter Stegen y Dani Alves han sido los que han repetido en el once, mientras que Piqué, Mascherano y Mathieu fueron de la partida en dos. Entre los goles encajados destacan fallos de comunicación de los jugadores, lentitud ante delanteros más rápidos -la ausencia de Jordi Alba es fundamental- y actuaciones dubitativas del portero.

Hay que remontarse hasta la temporada 96/97, cuando Luis Enrique jugaba a las órdenes de Sir Bobby Robson en el equipo culé, para ver a un Barcelona tan frágil en la línea defensiva. En aquel momento, los blaugrana tuvieron que esperar hasta la octava jornada de Liga para mantener un partido su puerta a cero y en ese intervalo, incluida la Supercopa de España, encajaron los 16 goles que actualmente lucen en la estadística.

Otro dato significativo es que el equipo culé no encajaba cuatro goles en tres partidos distintos en una temporada desde el año 2000/01 cuando Lorenzo Serra Ferrer llevaba las riendas de un equipo que acabó celebrando un cuarto puesto liguero con una chilena de Rivaldo.

Luis Enrique tiene mucho trabajo por delante y pocas soluciones en su plantilla. Con Vermaelen y Alba lesionados, le tocará confiar nuevamente en los mismos jugadores o apostar por la cantera con Bartra y Sergi Roberto como nombres propios. Más soluciones posibles no le quedan al asturiano.