El Real Madrid, bajo mínimos pero seguro en Estambul

La visita del Real Madrid a Estambul para medirse a Darussafaka Dogus llega de la mano de varios condicionantes que han puesto en duda la disputa del partido y las opciones de los blancos de sacar algo positivo del Volkswagen Arena. Pablo Laso solo ha podido viajar con 11 jugadores a la capital turca pero al menos tiene la certeza de que el partido se disputará y que la comitiva madridista estará bien protegida durante su estancia.

Los atentados del pasado fin de semana en el estadio del Besiktas, en Estambul, que se saldaron con 38 muertos y 155 heridos pusieron en estado de alerta a toda Turquía y en especial a los eventos deportivos que se pudieran celebrar en los días venideros a pocos kilómetros de distancia del lugar de los hechos, pero la seguridad será máxima para el Real Madrid durante su estancia y con controles exhaustivos en los alrededores del Volkswagen Arena, que se encuentra a solo nueve kilómetros de distancia del Besiktas Vodafone Arena, el encuentro podrá disputarse.

Las bajas en la plantilla son por tanto la mayor preocupación para un Pablo Laso que no podrá contar con dos de sus grandes pilares, Sergio Llull y Anthony Randolph, que se quedaron en Madrid con molestias físicas, se suman a una enfermería en la que permanece, desde hace varias semanas, Trey Thompkins, con una contusión en la cadera. El regreso del ’23’ parece cercano después de perderse los últimos encuentros, pero Laso no quiere forzar con él a pesar de que si fuera un partido importante, jugaría.

Con un récord de ocho victorias y tres derrotas, el Madrid busca una victoria que le permita consolidar la segunda plaza de la liguilla de Euroliga, que en estos momentos comparte con Fenerbahce, y un triunfo en territorio turco que vengue, de cierta forma, a la derrota sufrida en el último segundo del encuentro frente al propio Fenerbahce, que se impuso por un solo punto después de una rigurosa falta de Carroll señalada en contra de los intereses madridistas.