Isco desata su lado goleador

Isco está de dulce. El malagueño está encontrando su madurez futbolística a base de minutos y de oportunidades en las que, con su calidad, demuestra que tiene de todo. Un jugador con desborde, que se maneja con el balón en los pies como nadie y que, además, también tiene gol. El jugador del Real Madrid firmó con la selección española un partido sensacional, que terminó con el Bernabéu a sus pies. Suyos, además, fueron los dos goles con los que La Roja mandaba al descanso.

Y es que el media punta blanco está en el mejor momento de su carrera. Su calidad siempre ha sido innegable, pero con la BBC en el césped y un medio del campo innegociable, se llegaba incluso a entender que fuese suplente. Hasta que Zidane comenzó a rotar. A más minutos de Isco, el malagueño daba más espectáculo sobre el campo. Comenzó a acumular recital tras recital para, finalmente, poner en cuestión a una delantera que hasta el momento era intocable.

Él respondía a los minutos con argumentos. El Madrid era mejor cuando estaba en el terreno de juego y, además, su aporte era esencial para el conjunto blanco. Isco comenzó el pasado curso a demostrar su faceta más goleadora. En el último tramo de la temporada, los goles de Isco cogieron un peso mayor. Una exhibición ante el Dépor con un tanto del 22, un doblete frente al Sporting que, a la postre, sería vital para decantar el título de Liga, el gol que clasificó al Madrid para Cardiff… Y en este arranque de temporada más de lo mismo. El del Arroyo de la Miel fue el autor del segundo tanto madridista en la victoria ante el United en la Supercopa de Europa.

Todo esto, sumado a su papel fundamental con España. En la Selección, Isco es uno de los líderes. Lopetegui lo tiene claro, en su equipo siempre está. El madridista fue ante Italia el protagonista del encuentro al hacer dos tantos que sirvieron para dar a España prácticamente el billete directo al Mundial. Dos goles que se suman a los hechos en los últimos partidos que ha jugado con el combinado nacional. El malagueño marcó ante Israel a finales del pasado curso y también contra Inglaterra en el amistoso disputado en Wembley. Cuatro goles en sus cinco últimos partidos como internacional.

Isco, ante la falta de gol madridista

El momento de Isco como goleador coincide, además, con cuando más le necesita su equipo. El Real Madrid vive necesitado del gol. Sin Cristiano, los madridistas sufren para ver a sus delanteros marcar. Además, la salida de Morata y James ha restado un aporte de entre 25 o 30 goles por temporada. Pero Isco puede ser una de las soluciones.

Su mayor acierto de cara al gol y su crecimiento dentro del juego del equipo, hacen que el Madrid tenga en el malagueño a una de las bazas para solucionar sus problemas de cara al gol. Con Bale y Benzema, por el momento, desdibujados y Cristiano sancionado aún, el conjunto blanco necesita más que nunca de él y de Asensio para poner remedio al mal de cara a puerta.