El dilema de Solari: Rotar o no rotar

El Real Madrid visita al Levante en la víspera de una intensa semana. El conjunto madridista deberá afrontar tras esta jornada la vuelta de semifinales de Copa frente al Barça, el Clásico liguero y deberá resolver la eliminatoria frente al Ajax en octavos de Champions. El dilema de Santiago Solari para el duelo del Ciutat de Valencia es evidente: rotar o no rotar.

El problema es claro, pues los madridistas deberán dar el máximo en los cuatro encuentros para poder reengancharse a la pelea por los tres títulos. Frente al Levante, la rotación debería ser algo normal, pero después de lo visto en la última jornada ante el Girona, dar descanso a los titulares sería arriesgar demasiado.

El plan B no le funcionó en su última prueba. El técnico argentino se vio obligado a dar refresco a su plantilla después de otra dura semana en la que la plantilla tuvo que afrontar tres duros encuentros fuera de casa contra al conjunto culé, el Atlético y el Ajax. Pero entonces y contra todo pronóstico, los blancos cayeron en su partido más ‘sencillo’ de la semana, en el Bernabéu contra el Girona y después de adelantarse 1-0.

Entonces, el entrenador madridista quedó como uno de los principales señalados, además de diversos jugadores como Marcelo o Bale. Tras una semana de descanso para todos los jugadores, en la que no han jugado y en la que han podido prepararse a conciencia para lo que viene, las dudas vuelven a asaltar a Solari.

Lo que está claro es que en los dos encuentros ante el Barça y contra el Ajax apostará por sus mejores hombres. Los blancos se juegan gran parte de la temporada en esos encuentros y cualquier traspiés puede suponer la estocada definitiva al curso. Por ello, para evitar que lleguen con minutos de más en las piernas, deberían descansar.

Sin embargo, la lógica dice que el argentino no se la jugará. Solari no puede arriesgar demasiado y, después de darles descanso frente a los de Eusebio, los titulares volverán a la acción. Las únicas dudas evidentes son las de los jugadores apercibidos. De rotar y volver a pinchar, las dudas volverían a sobrevolar el Bernabéu antes de una semana vital para los intereses madridistas.