CHAMPIONS LEAGUE: OPORTO VS JUVENTUS

Casillas frenó a Higuaín con un paradón… pero no pudo evitar la derrota del Oporto (0-2)

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Casillas protesta una jugada ante su compañero y compatriota Marcano. (AFP)

Corría el minuto 26 del Oporto-Juventus de Turín correspondiente a la ida de octavos de final de la Champions League cuando la eliminatoria iba a dar un giro radical, o al menos eso parecía.

El lateral izquierdo brasileño Alex Telles veía su segunda amarilla en apenas un minuto y dejaba a Los Dragones con un jugador menos, con todavía más de una hora de juego por delante. Ahí es dónde empezó a aparecer de nuevo la figura de Iker Casillas.

El ex portero del Real Madrid, en las filas del conjunto portugués desde hace dos veranos, había sido un mero espectador del partido hasta entonces, pero una vez más volvió a demostrar que nunca se esconde en las grandes citas.

La Vecchia Signora buscaba adelantarse en el marcador incluso antes del descanso con otro ex madridista como Gonzalo Higuaín que ya celebraba su habitual cita con el gol. Sin embargo, el argentino no contaba con la espectacular estirada del que fuera su compañero que sacó a córner su disparo rebotado en el también carioca y defensor Felipe.

Un mérito por partida doble ya que el guardameta español no vio cómo el balón se colaba en su portería prácticamente hasta escasos centímetros de la misma línea de cal, tal y hizo hace poco más de quince días en la Liga NOS.

Su gozo en un pozo

Antes de llegar al descanso, Casillas tiró de la experiencia que atesora perdiendo unos segundos muy valiosos para irse a vestuarios con un meritorio 0-0 dadas las circunstancias. Sin embargo, estos últimos minutos de la primera mitad no iban a ser más que un reflejo de lo que se viviría en la segunda.

El Oporto entero se encerraba atrás y el ex madridista demostraba por qué había sido el portero menos goleado de la primera vuelta en Europa. Fue entonces cuando la Juventus de Turín moviera el banquillo en busca de soluciones, y bien que las encontró ante la desgracia del internacional español y sus compañeros.

Primero Pjaca y poco después Dani Alves dejaban la eliminatoria casi sentenciada con dos goles ante los que nada pudo hacer el que fuera capitán del Real Madrid durante casi la última década ante su decepción.

Iker pedía un último esfuerzo a sus defensores y centrocampistas a sabiendas que más goles sí que les dejarían sin opciones en la vuelta en el Juventus Stadium, el que se presume último reencuentro con su amigo Gianluigi Buffon.

 

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