Benítez se niega a traspasar a Sissoko al Madrid

Rafa Benítez sigue empeñado en hacer daño al Real Madrid. No le bastó con seis meses de un fútbol anodino, con ningunear a Cristiano, con dejar una plantilla físicamente rota, con alinear en la Copa a un futbolista sancionado o con perder 0-4 con el Barça en el Bernabéu, ahora Benítez quiere presumir de ser el enemigo público número uno del Real Madrid aunque sea ya, gracias a Dios, lejos del banquillo del Bernabéu. Y lo hará con Moussa Sissoko.

El técnico del Newcastle, que consumó el descenso a la segunda división inglesa cuando cogió a las urracas a final de temporada, se ha cerrado en banda al traspaso de Sissoko al Real Madrid. «Sissoko es intransferible», ha dicho Rafa Benítez a los dirigentes del club inglés ante el interés del club blanco en fichar al centrocampista francés.

Tanto Zidane como los dirigentes madridistas siguieron con atención la espectacular Eurocopa que completó Sissoko, que empezó de suplente y acabo quitándole el puesto a Kanté. Tal como adelantó DIARIO MADRIDISTA el pasado 11 de julio, en el Real Madrid tomaron nota de la Eurocopa de Sissoko y Draxler como alternativas a Pogba y Hazard, los dos favoritos de Zizou, cuyo precio en ambos casos rondaba o superaba los 100 millones de euros.

El Newcastle no tiene apuros económicos

Además de Rafa Benítez, el Real Madrid se topa con otro problema en la operación Sissoko. El Newcastle es uno de los clubes más ricos de Inglaterra. Desde los tiempos de Alan Shearer, las urracas han sido un club comprador, de los que mejor paga en la Premier y de los pioneros en la explotación de los derechos de marketing.

Sin agobios económicos, los dueños del Newcastle harán lo que diga Benítez. Si no se puede vender a Sissoko, pues no se le vende. La prueba del músculo financiero del club ingles es que, a pesar de haber descendido a la Premiership, en menos de un mes se ha gastado casi 33 millones de euros en recomponer al gusto de Benítez una plantilla desequilibrada con los fichajes de Matt Ritchie (Bournemouth), Dwight Gayle (Crystal Palace), Marz Sels (Gante), Jesús Gámez (Atlético) e Isaac Hayden (Arsenal).

Líder Sissoko

Benítez se niega a traspasar a Sissoko al Real Madrid porque quiere que sea el líder de su nuevo proyecto. Por eso le otorgó el brazalete de capitán a finales de la pasada temporada. Sissoko había desaparecido del mapa como futbolista, pero con la llegada del ex técnico madridista el francés acabó la Premier como un tiro y Deschamps –tras la baja por lesión de Lass Diarra– le incluyó en la lista de Francia para la Eurocopa.

«Nosotros no queremos vender, así que no hemos puesto ningún precio y estamos satisfechos. Estamos contentos con Sissoko. Yo personalmente le aprecio mucho y creo que no le perderemos», declaró Rafa Benítez al canal de televisión del Newcastle justo después de la Eurocopa.

El jugador quiere salir

Sissoko está loco por salir del Newcastle y si es al Real Madrid, mejor. El jugador, a sus 26 años, cree que está en la plenitud de su carrera deportiva y no está dispuesto a perder un año en segunda división y sin competición europea. Por eso pidió al Newcastle que le traspasara cuando se consumó el descenso.

Sus agentes, la empresa Mondial Sport, no entienden la postura de Benítez ni el never, never, never del Newcastle. “No lo entendemos, la verdad. Se acordó que Moussa se quedase una temporada más en Newcastle para ayudar al equipo. Lo hizo lo mejor que pudo. El club siempre había dicho que le dejaría marchar por entre 18 millones y un máximo de 25. Espero que Benítez y el presidente sean más razonables para hablar sobre el futuro de Sissoko”, dijeron sus agentes a fichajes.com.