Tiene a sus espaldas numerosos antecedentes

Apalizan en Tenerife al ultra del Betis que agredió a un hombre en Bilbao

El famoso ultra del Betis fue apaleado en los Carnavales de Santa Cruz de Tenerife por los miembros de seguridad de una discoteca de la isla.

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Manuel Herrera Perejón se dio a conocer el pasado 2017 en uno de los incidentes más vergonzosos de los últimos tiempos en la esfera futbolística. En abril del aquel año se disputaba en Bilbao un Athletic-Betis que llevó al mencionado individuo hasta la Plaza Nueva de la ciudad vasca. Herrera, ultra del Betis y al que se le vincula con ideología nazi –como atestiguan sus tatuajes por todo el cuerpo–, agredió a un hombre que tomaba café al grito de «¡Tú, Gabilondo, ¿eres un proetarra?!».

Aquello fue captado por un móvil –de algún conocido de Herrera– y compartido por redes sociales, viralizándose y llegando a los cuerpos de policía. Por aquella agresión, el sevillano aceptó ocho meses de cárcel por un «delito contra la integridad moral», imposibilitándole usar las redes sociales e imponiéndole su alejamiento de la ciudad andaluza. El individuo, a sus 31 años, cuenta con una amplia lista de delitos. La última data de los Carnavales de Santa Cruz de Tenerife, donde fue apaleado.

En redes sociales, al igual que en 2017, se ha viralizado un incidente en el que Manuel Herrera vuelve a ser protagonista, esta vez objeto de una brutal paliza tras encararse a miembros de seguridad de una conocida discoteca de la isla. El sevillano fue golpeado en reiteradas ocasiones, por las que necesitó asistencia médica y superó la decena de puntos de sutura. Hasta el recinto se desplazó la Unipol, la policía local tinerfeña. En estos momentos, se encuentra en libertad provisional por estos hechos.

En 2018 fue detenido dentro de una operación antidroga en Andalucía llevado a cabo por la Policía Nacional y la Guardia Civil que desmanteló un red internacional que traficaba con hachís en España y el norte de África. Data también una paliza a un joven homosexual en 2016 en un discoteca de ambiente gay por la que ingresó en presión dos meses.

Además de esto, también se le reconoce una colisión con un coche de la Guardia Civil tras escapar de un control en Sevilla en 2017, en 2015 una agresión en Cádiz para cobrar una deuda, diversas peleas entre ultras de diferentes clubes, así como una multa de 60.000 euros por parte del Comité Antiviolencia por acceder a la zona visitante del Coliseum Alfonso Pérez pese a tener prohibida la admisión.

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