Que a nosotros en COOL nos apasionan los coches clásicos no es novedad. En esta ocasión, te hablamos de un modelo Talbot-Lago de 1949 que podría subastarse por 2 millones de euros, algo que se llevará a cabo el 18 de agosto de este 2023 en la edición número 26 de la subasta anual de Quail Lodge, que se llevará a cabo en Quail Lodge & Golf Club en Carmel, California. Un histórico exclusivo del que te contamos todos los detalles a continuación…
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El modelo Talbot-Lago se creó en 1936 por parte del fabricante Automobiles Talbot France que cerró sus puertas ese mismo año. Por ello, el modelo T150-C-SS Teardrop Coupe de Talbot-Lago está considerado como uno de los autos de antes de la Segunda Guerra Mundial más importantes y bellos jamás fabricados.
Un automóvil francés que se presenta, según el experto Claude Delaisse, de forma «majestuosay fluida. Y fue moldeado en metal por el carrocero parisino Dubos, más conocido por el famoso Bugatti Type 51 Dubos coupé».
El propietario original del automóvil, Monsieur Paul Gerbe, lo tuvo en su poder durante aproximadamente una década. Luego, el Talbot-Lago llegó a los Estados Unidos a principios de la década de 1960. Luego, pasó a manos de André Surmain, el famoso restaurador y coleccionista de automóviles aficionado a los vehículos franceses, quien finalmente trajo el Talbot-Lago a Europa con él en la década de 1970. Más tarde, Surmain vendió el automóvil al destacado coleccionista Anthony Bamford, y posteriormente cambió de manos nuevamente antes de llegar a Lindley Locke en 1976. Locke poseía una serie de Talbot-Lago espectaculares, aunque nunca usó ninguno.
Cabe destacar que los expertos han mostrado su sorpresa ante el buen estado del vehículo ya que no es común que un coche de esta importancia se haya conservado casi en su estado original sin sufrir la intervención de restauradores (bien intencionados o no) en las décadas transcurridas desde su fabricación. Este Talbot-Lago 26 Grand Sport Convertible, probablemente el único Talbot-Lago significativo que permanece sin restaurar y por ello, presenta a su próximo propietario dos perspectivas convincentes: disfrutar de este coche clásico en su estado actual de conservación o encargar una restauración a gran escala de este concurso. joya automotriz rara y digna. Independientemente de la decisión, el derecho a hacerlo incluso costará más de 2 millones de euros cuando el automóvil cruce el bloque de subasta.
