Contenido
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- 0.2 Esto es lo que significa que una persona se deje siempre un poco de café en la taza, según la psicología
- 0.3 Ni cine ni teatro: la actividad social recomendada para que los mayores de 60 mantengan la memoria activa
- 1 ¿Qué forma de ojos está asociada con la inteligencia?
- 2 Morfopsicología: la disciplina que busca interpretar el rostro
- 3 Otros rasgos faciales y lo que sugieren sobre la personalidad
La expresión «los ojos son el espejo del alma» se queda corta para lo que algunos expertos afirman. Más allá de las emociones que transmiten, hay quienes creen que su forma y tamaño podrían estar relacionados con cualidades como la inteligencia o la capacidad de análisis.
Aunque estas interpretaciones no parten de evidencias científicas sólidas, sí responden a cómo la sociedad interpreta visualmente ciertos rasgos faciales. Esas percepciones tienen consecuencias reales en la manera en que nos vemos y nos relacionamos con los demás.
¿Qué forma de ojos está asociada con la inteligencia?
Hay un tipo de ojos que suele vincularse con mayores capacidades intelectuales: los ojos pequeños. Este rasgo se percibe como indicativo de inteligencia e inquietud. La asociación responde a la idea de que una mirada aguda y concentrada refleja un pensamiento constante y analítico.
Por el contrario, los ojos grandes suelen relacionarse con emociones como la sinceridad y ambición. También se interpreta que quienes los tienen tienen una mayor capacidad de expresar sentimientos. En ambos casos, no es tanto una cuestión de realidad biológica, sino de percepción social.
Morfopsicología: la disciplina que busca interpretar el rostro
Estas observaciones provienen de una corriente llamada morfopsicología, una disciplina sin validación científica, pero que ha ganado atención en contextos como la estética y la psicología de la imagen.
Según esta visión, el rostro refleja elementos de nuestra historia personal, emocional y cultural. No se trata de una ciencia exacta. Ésta se basa en un conjunto de interpretaciones basadas en la observación de cómo ciertos rasgos se asocian a patrones de conducta percibidos.
Como explican desde el Instituto dermoestético Ilahy, la morfopsicología no afirma que el rostro determine la personalidad, sino que la percepción de los rasgos faciales influye en la forma en que somos interpretados socialmente.
Otros rasgos faciales y lo que sugieren sobre la personalidad
Además de los ojos, otros elementos del rostro también son objeto de interpretación. Estos son algunos de los más destacados:
- Nariz: una nariz recta suele asociarse con el orden, mientras que una aguileña puede interpretarse como símbolo de sensualidad. Por otra parte, una nariz respingona es percibida como nobleza y una nariz larga como determinación.
- Boca: esta parte de nuestro rostros junto a sus labios muestran nuestra expresividad. Según los expertos de Ilahy, «el grosor de los labios y la forma de la boca pueden sugerir claridad en la forma de pensar y expresarse, pueden señalar confianza y seguridad, y sin duda los labios son rasgos que expresan sensualidad».
- Orejas: su posición también tiene connotaciones. Unas orejas altas, por ejemplo, se relacionan con rapidez mental. Por otra parte, unas más bajas sugieren indecisión.
- Arrugas en el rostro: son una muestra de las experiencias vividas. Las personas perciben las arrugas en la frente como un signo de mal humor. Las arrugas en el entrecejo son interpretadas como obsesión y las de la frente y los ojos como tristeza. Por último, las arrugas en las cejas muestran reflexión, las patas de gallo reflejan preocupación y las arrugas cerca de la boca son un indicador de orgullo.
La percepción social de los rasgos faciales influye en nuestra imagen y autoestima, aunque no reflejen la realidad.