Contenido
Una de las maneras más claras y contundentes de analizar la educación de las personas es la manera en que se comunican en su vida cotidiana y las frases que dicen. En este sentido, el lenguaje es una representación de cómo consideramos a los demás porque nos permite transmitir respeto, cortesía y empatía. Por eso, las frases que utilizan las personas con alta educación se convierten en expresiones que ayudan a construir vínculos más armoniosos, sinceros y positivos. Las frases más recurrentes suelen ser por favor, gracias y lo siento. Son afirmaciones que tiene un valor importante porque permiten reforzar la convivencia y proyectan una imagen positiva tanto en entornos personales como profesionales.
Las frases de quienes saben comportarse y con educación tienen un componente cultural y social considerable y valioso. De acuerdo al Instituto Cervantes, el lenguaje cortés es una herramienta de cohesión social, porque facilita la interacción respetuosa entre individuos de diferentes contextos y culturas. A su vez, el Consejo de Europa también ha promovido iniciativas para fomentar la competencia comunicativa y la cortesía verbal en programas de aprendizaje de lenguas, destacando que expresarse con respeto es una competencia esencial en sociedades diversas. También la Real Academia Española (RAE) valora los buenos usos lingüísticos, porque además de mantener la riqueza del idioma, contribuyen a que las interacciones sean más claras y fluidas. «En este sentido, las frases que dicen las personas educadas son el reflejo de una habilidad social que no depende solo del vocabulario, sino de la actitud y la intención comunicativa con la que se construye el mensaje», sostienen expertos de la RAE.
Qué frases suelen decir las personas con alta educación
Las expresiones de cortesía más conocidas y universales son por favor y gracias. En general, son frases frecuentes que se aprenden desde la infancia y, con el tiempo, se aprende a considerarlas como verdaderos gestos de reconocimiento hacia la otra persona.
«Cuando alguien utiliza estas frases de manera genuina, transmite consideración y gratitud, lo que ayuda a generar confianza y mejorar las relaciones interpersonales», mencionan integrantes de la Real Academia Española.
Según el Instituto Cervantes, la cortesía lingüística no es un adorno, sino una forma de cooperación en el diálogo, porque permite que las solicitudes sean más amenas y se valoran los actos de los demás.
La importancia del disculpa y el lo siento
En una sociedad donde los malentendidos o los errores son inevitables, pedir disculpas se convierte en una de las expresiones más importantes dentro de la educación. Decir lo siento o perdón no solo implica reconocer un fallo, sino también mostrar empatía hacia quien pudo verse afectado por nuestras acciones y comentarios.
El Consejo de Europa destaca que pedir disculpas en el momento adecuado contribuye a restablecer la confianza y a reparar posibles daños emocionales. «Una persona educada no evita la responsabilidad, sino que la asume con palabras claras y sinceras», agregan.
Cómo saludar y despedirse correctamente
Otra característica de las personas educadas es que nunca olvidan la importancia de saludar y despedirse de manera correcta. En ese sentido, frases como buenos días, buenas tardes, que tengas un buen día o hasta luego son pequeños gestos que reconocen la presencia del otro.
«El saludo forma parte de los actos de habla que consolidan las normas de cortesía y convivencia, lo que explica su importancia en cualquier lengua y cultura. Estas expresiones, además, predisponen de manera positiva a la comunicación que viene después», afirman miembros de la RAE.
¿Por qué es positivo decir frases que reflejan alta educación?
Las personas educadas también destacan por su capacidad de reconocer los logros y las cualidades de los demás. Las expresiones como me alegro por ti, has hecho un gran trabajo o te felicito transmiten apoyo.
Son frases que fortalecen la autoestima del interlocutor y refuerzan las relaciones sociales. Según la Sociedad Científica Española de Psicología Social (SCEPS), el reconocimiento verbal tiene un efecto directo en el bienestar emocional y en la percepción positiva de las relaciones humanas.
La cortesía en los contextos profesionales
En el ámbito laboral, frases como ¿podrías ayudarme con esto, por favor?, agradezco tu tiempo o si no es molestia facilitan el trabajo en equipo y generan un ambiente de respeto.
Desde la Comisión Europea recomiendan el uso de expresiones de cortesía como parte de las competencias profesionales básicas para desenvolverse en entornos internacionales. «Una persona que habla con respeto y tacto demuestra empatía y capacidad de colaboración», destacan miembros de SCEPS.
Además, indican que las frases que dicen las personas educadas representan la esencia de la convivencia respetuosa y son mucho más que simples normas de cortesía. «Las expresiones por favor, gracias, lo siento o me alegro por ti construyen confianza, reducen conflictos y fortalecen los lazos humanos», concluyen.