¿Por qué miramos el móvil constantemente, según la psicología?

¿Por qué miramos el móvil constantemente, según la psicología?

El desarrollo de la tecnología y los avances que presentan los dispositivos portátiles se observan como una ventaja para llevar a cabo diferentes tareas, actividades, proyectos e investigaciones en ámbitos laborales y educativos. Sin embargo, desde hace unas décadas los modelos de móviles más modernos disponen de numerosas funciones y aplicaciones que no se limitan a llamadas y mensajes. Por esto no nos despegamos de este dispositivo. Es una pregunta frecuente el por qué siempre miramos el móvil. Su incidencia en nuestro estado de salud físico, psicológico y emocional se incrementa con el paso del tiempo y las múltiples opciones que existen en el mercado para acceder a un móvil cada vez mejor.

Los expertos de los Institutos Nacionales de Salud afirman que los teléfonos inteligentes son una forma de comunicación popular en todo el mundo en este siglo. En ese sentido, destacan que el teléfono evolucionó desde funciones comunicativas básicas (solo llamadas) a ser un dispositivo que sustituye al ordenador en algunos sentidos, y es utilizado para navegar por la web, juegos, comunicación instantánea en plataformas de redes sociales y herramientas de productividad relacionadas con el procesamiento de textos. Es una realidad que los teléfonos nos mantienen conectados, pero en los últimos años se observan muchas personas que están obsesionadas con ellos. Dicha obsesión puede conducir a funciones cognitivas y estados de ánimo/afectivos perjudiciales. «La dependencia de los móviles se ha relacionado con una forma de dependencia psicológica, y esta dependencia tiene un efecto perjudicial en nuestro estado de ánimo afectivo», dicen profesionales del instituto. Una de las experiencias más notorias se evidencia en los sentimientos de ansiedad cuando uno se separa de su teléfono, estado anímico que puede interferir con la capacidad de prestar atención a la información.

Las razones de mirar el móvil constantemente

Existen tendencias muy arraigadas en el contexto de las últimas dos décadas a partir del uso de internet y las redes de conectividad móvil. Uno de los efectos más alarmantes es el aumento de tiempo que pasan muchas personas con sus teléfonos inteligentes.

Un evento cada vez más frecuente es la distracción de nuestra visión hacia la pantalla del móvil y el descenso en el contacto visual con las personas que nos encontramos compartiendo una reunión, cita, festejo o actividad recreativa. Esta situación produce un aumento de la desconexión en el vínculo y en el valor que se le da a los sentidos corporales de las miradas, afectos, sonidos y palabras.

Una de las razones se encuentra en el deseo y la necesidad de no perderse nada de lo que está pasando, ya sea por parte de amigos, familiares e incluso deportistas y famosos. Por lo tanto, se genera una permanente conexión a plataformas y redes sociales para actualizarse de las últimas publicaciones y noticias.

Desde la Universidad de Rochester mencionan que el móvil es parte integral de las tareas cotidianas, como obtener direcciones, acceder a noticias y entretenimiento, comunicarse con familiares, amigos y compañeros de trabajo y administrar agendas y reuniones.

Una de las dificultades que genera mirar siempre el móvil es la adicción y la imposibilidad de controlar el tiempo frente a las pantallas. «El uso excesivo de teléfonos móviles se ha atribuido a un aumento de problemas de salud física y mental, como fatiga visual, dolor de cuello, dolor de espalda, depresión, soledad, trastornos del estado de ánimo y alteraciones del sueño», advierten los profesionales.

¿Qué consecuencias genera mirar siempre el móvil?

Con el paso del tiempo es frecuente que determinadas conductas permitan identificar una adicción al uso del móvil. Entre ellas pueden identificarse la pérdida de grandes cantidades de tiempo revisando aplicaciones o navegando por Internet.

Además, la sensación de ansiedad e inquietud por no poder tener tu teléfono es otro de los efectos negativos que invita a pensar en la gravedad de por qué siempre miramos el móvil.

«El uso de tu teléfono ha interferido con tu productividad en el trabajo o en el hogar. También si lo utilizas en situaciones peligrosas o inapropiadas, como al conducir o cruzar la calle», advierten.

Dolor y rigidez en las manos y los dedos

Clínica HC Marbella nombra que podemos sentir dolor y rigidez tanto en los dedos como en las manos; es probable que incluso sintamos cierto hormigueo y es que, la musculatura de nuestra mano se resiente ante tantos minutos-horas de estar pulsando las teclas del teléfono.

Dolor de cuello

Sensación de sobrecarga y tensión en la zona de los hombros y el cuello. Su origen no es otro que la sobrecarga de la musculatura de la zona por la postura forzada de pasar excesivo tiempo con el smartphone o la tableta entre manos.

Aumento del estrés

Relacionado con el efecto que provoca estar continuamente pendientes de nuestras notificaciones, correos o revisiones de redes sociales, se produce un incremento de la irritabilidad de nuestro sistema nervioso.

¿Qué consecuencias se generan en tu salud visual?

La Clínica Baviera sugiere revisar los hábitos del uso excesivo y permanente de los teléfonos móviles debido al incremento de anomalías visuales que cada vez surgen más  en millones de personas.

Una de ellas es la fatiga visual, producto de sobrepasar el límite de horas recomendadas para estar frente a la pantalla de un dispositivo. En este sentido, explican que es normal que los ojos se resientan más de lo normal y disminuya la calidad de tu visión.

Otra consecuencia son los dolores de cabeza y migrañas. Las luces que emiten los dispositivos portátiles producen un efecto de cansancio que se manifiesta con molestias en tu cabeza.

«La sobre exposición a las pantallas hace que el nivel de hidratación de tus ojos descienda. Como consecuencia, se produce sequedad ocular y ojos rojos», explican miembros de la clínica.

Tu capacidad visual puede verse comprometida si estás demasiadas horas utilizando un móvil. Se genera una exposición de gran intensidad que aumenta el esfuerzo de tus músculos oculares.

El por qué siempre miramos el móvil es algo que siguen estudiando profesionales y, al parecer, surge un impulso y deseo de permanecer hiperconectados en diferentes redes y plataformas que publican noticias y videos que captan nuestros intereses, gustos, deseos y valores culturales.

Sin embargo, el uso excesivo de los dispositivos electrónicos causa un aumento en el número de casos de hipermetropía, astigmatismo y miopía que se presentan como afecciones nocivas para tu calidad de vida.

 

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