Contenido
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- 0.3 Cómo saber si tu madre ha sido una persona tóxica contigo: las señales que lo confirman, según los expertos
- 1 Las características de los manipuladores emocionales
- 1.1 Emplean la culpabilización
- 1.2 Practican el Gaslighting
- 1.3 Buscan controlar a las personas
- 1.4 Son muy encantadores al inicio
- 1.5 Invalidan o minimizan los sentimientos de los demás
- 1.6 Te inculcan que no puedes vivir sin ellos
- 1.7 ¿Cómo se desenvuelven los manipuladores emocionales?
- 1.8 Consejos para evitar caer en la manipulación emocional
Los manipuladores son personas que utilizan métodos psicológicos y emocionales para controlar, influir y dominar a los demás en su beneficio. Estas personas son expertas en generar sentimientos de culpa, inseguridad, y dependencia, lo que les permite obtener lo que quieren, sin importar el daño que puedan causar a su alrededor. Reconocer a un manipulador emocional puede ser difícil, ya que suelen ser muy astutos y persuasivos. Sin embargo, entender sus características y comportamientos es fundamental para protegerse de sus estrategias y evitar caer en sus trampas.
La psicóloga Cristina Galán explica que «la manipulación emocional es un manoseo de tus emociones a través del cual terminas haciendo lo que no quieres para complacer al otro». Su objetivo principal es obtener poder, satisfacción o lo que desean sin importar las consecuencias que esto tenga para los demás. Aunque pueden parecer amables y comprensivas al principio, su comportamiento es tóxico y se basa en el control, la manipulación y la explotación de las emociones ajenas. Reconocer sus características es esencial para protegerse de su influencia. Una de sus tácticas más comunes es la culpabilización, haciendo que las personas se sientan responsables de sus problemas o emociones. También utilizan el gaslighting, que consiste en hacer que la víctima dude de su propia realidad o percepción. Reconocer estos patrones es crucial para establecer límites saludables y evitar caer en sus estrategias.
Las características de los manipuladores emocionales
Emplean la culpabilización
Una de las tácticas más comunes de los manipuladores emocionales es hacer que la víctima se sienta culpable por cosas que no son su responsabilidad. A menudo, se les hace creer que, si algo sale mal, es por su culpa.
Esto genera inseguridad y ansiedad en la víctima, quien comienza a dudar de sí misma y su percepción de la realidad.
Practican el Gaslighting
Según Prado Psicólogos Madrid, el gaslighting se trata de una manipulación mental tan sutil que muchas personas no se percatan de ella. El manipulador emocional se dedica a minar la autoconfianza de su víctima distorsionando la realidad para adaptarla a su visión de lo que sucede. En casos extremos, la víctima llega a dudar de su memoria y acciones.
Buscan controlar a las personas
«Los manipuladores buscan controlar a las personas y a las situaciones para así poder manipular según sus deseos y satisfacer sus necesidades», explica Cristina Galán.
Los manipuladores intentan establecer vínculos en las que ellos tengan el control total. Esto puede manifestarse a través de decisiones unilaterales, aislamiento social de la víctima, o estableciendo reglas y expectativas que son injustas o irracionales.
Son muy encantadores al inicio
Los manipuladores emocionales suelen ser personas carismáticas y agradables al principio de una relación. Se presentan como empáticos, comprensivos y atentos, lo que hace que la víctima se sienta especial y valorada. Esto crea una falsa sensación de confianza, lo que facilita la manipulación posterior.
Invalidan o minimizan los sentimientos de los demás
Una táctica común es invalidar o descalificar las emociones de la víctima, haciéndola sentir que sus pensamientos y sentimientos no tienen valor. Esto se hace para que la víctima dependa cada vez más de la aprobación del manipulador.
Te inculcan que no puedes vivir sin ellos
Los manipuladores emocionales crean un ambiente de dependencia emocional en el que la víctima siente que no puede vivir sin ellos. Esto genera una relación tóxica en la que la víctima siente que necesita la validación constante del manipulador.
¿Cómo se desenvuelven los manipuladores emocionales?
El comportamiento de un manipulador emocional suele ser muy sutil y progresivo, lo que hace que sus acciones sean difíciles de identificar al principio. Aquí te presentamos algunas de las formas en las que tales personas actúan para controlar a sus víctimas:
Exigen atención siempre
Los manipuladores emocionales suelen demandar atención constante y actúan como si siempre necesitaran algo de ti. Si no cumples con sus expectativas, pueden hacerte sentir culpable.
Juegan con tus miedos y vulnerabilidades
Saben cuáles son tus inseguridades y las utilizan en su beneficio. Si sabes que tienes miedo al abandono, por ejemplo, pueden usar este miedo para hacerte sentir culpable por no satisfacer sus demandas.
Cambios de actitud constantes
Un manipulador puede alternar entre ser muy afectuoso y distante. Estos cambios impredecibles pueden causar confusión en la víctima, quien no sabe cómo reaccionar ante esta montaña rusa emocional.
Consejos para evitar caer en la manipulación emocional
No te dejes manipular por la culpa
Tales personas pueden hacerte sentir culpable por cosas que no son tu responsabilidad. «No tienen remordimientos, no sienten culpa por manipular. Siempre están justificando de una u otra manera todos los actos que tienen», afirma Cristina Galán. Aprende a reconocer cuando te están culpabilizando injustamente.
Establece límites claros
Suelen ignorar los límites. Establecer y mantener límites saludables es fundamental para protegerte de sus tácticas.
Confía en tu intuición
Si algo no se siente bien, es probable que no lo sea. Escucha tu voz interior y no ignores las señales de alerta.
Busca apoyo y contención
Si te sientes inseguro o confundido, habla con amigos, familiares o profesionales que te puedan dar una perspectiva objetiva de la situación.