Contenido
- 0.1 Los temas de conversación que siempre sacan las personas con habilidades sociales bajas, según la psicología
- 0.2 Ana Medialdea, experta en psicología: el significado de que alguien no hable las cosas para evitar discusiones
- 0.3 Los camareros lo hacen y todos picamos sin darnos cuenta: los trucos psicológicos para que dejemos más propina
- 1 Esto es lo que recomiendan los expertos a los familiares de mayores de 65 que viven solos
- 2 Qué juegos ayudan de verdad a mantener las habilidades cognitivas a partir de los 65 años
Según van pasando los años, la rutina ya no se basa en salir, quedar con los amigos o coincidir con los colegas del trabajo. Poco a poco, el día se reduce a estar en casa y pasar la tarde en el sofá. Al principio parece un descanso merecido, pero a los 65 años, cuando se vive solo, esa calma puede empezar a pesar mucho más de lo que parece.
Según el Barómetro de la Soledad No Deseada en España (SoledadES), la soledad entre las personas mayores se ha convertido en un problema creciente, especialmente entre quienes viven solos. El informe refleja cómo el aislamiento emocional aumenta con la edad y cómo afecta directamente a la salud cognitiva, mental y cardiovascular.
Por eso, la familia tiene que actuar antes de que la soledad se haga hueco. Y una de las mejores opciones para los mayores que viven solos es más sencilla de lo que muchos imaginan.
Esto es lo que recomiendan los expertos a los familiares de mayores de 65 que viven solos
Desde Aiudo, empresa especializada en la selección de cuidadores a domicilio, insisten en que el entorno familiar marca la diferencia. No basta con pasar a saludar, hay que implicarse, sobre todo cuando el mayor ya arrastra alguna limitación física o cognitiva que le frena en su día a día.
Lo que recomiendan es compartir actividades que no sólo acompañen, sino que estimulen. Y entre todas las opciones posibles, hay una que funciona especialmente bien y que, sorprendentemente, muchas familias pasan por alto: jugar con ellos a juegos que mantengan vivas sus habilidades cognitivas.
Esta práctica engancha por varias razones. La mente trabaja, se activa, crea nuevas conexiones y mantiene en buen estado funciones básicas como la memoria, la atención y el razonamiento. Además, mejora el ánimo, reduce el estrés y rompe la sensación de vacío que aparece cuando pasan días sin hablar con nadie. Y, lo más importante, refuerza el vínculo entre el mayor y sus familiares.
Jugar aporta algo más que entretenimiento, pues da estructura al día, anima a salir de la apatía y ayuda a retrasar problemas asociados al envejecimiento. Y cuando esto se combina con una presencia familiar constante, la soledad pierde fuerza.
Qué juegos ayudan de verdad a mantener las habilidades cognitivas a partir de los 65 años
Los juegos que mejor funcionan a partir de los 65 años son los que obligan a pensar, recordar, decidir o comparar. Los clásicos de mesa siguen dando resultado: damas, ajedrez, dominó o parchís. También los juegos de cartas como La Escoba o El Cinquillo, que mantienen la mente despierta y, además, invitan a conversar mientras se juega.
Los pasatiempos escritos aportan otro tipo de estímulo. Crucigramas, sudokus, sopas de letras y rompecabezas ayudan a concentrarse y a ordenar ideas. Los juegos de memoria, como el memorama, trabajan de lleno la memoria visual. Y quienes disfrutan con retos más manuales pueden recurrir al Cubo de Rubik.
Los videojuegos también tienen su espacio si se usan con moderación. Tetris o Pac-Man sirven para mantener la atención y la agilidad mental sin agobiar. Incluso algunos juegos tranquilos basados en metas pequeñas pueden ayudar a centrar la mente.
La clave está en variar y mantener cierta regularidad. Leer a diario, aprender algo nuevo, practicar alguna afición manual o participar en actividades sociales completa ese trabajo cognitivo.






