La razón por la que a veces no podemos sostener la mirada al hablar con otra persona, según la psicología

El contacto visual es una parte esencial de la comunicación humana, ya que permite establecer una conexión directa entre las personas

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Hombre evitando la mirada

Mantener el contacto visual durante una conversación es un componente crucial de la comunicación no verbal. Este gesto comunica interés, empatía y atención, y permite a las personas percibir las emociones de su interlocutor sin necesidad de palabras. Sostener la mirada no solo denota respeto, sino que también facilita la comprensión y fortalece la relación entre las personas.

Sin embargo, cuando una persona evita el contacto visual, puede ser por razones que no siempre están relacionadas con la deshonestidad o el desinterés, como a menudo se piensa.

¿Por qué algunas personas no pueden sostener la mirada?

Existen múltiples explicaciones psicológicas para entender por qué resulta tan difícil para algunos en ciertos momentos sostener la mirada con alguien. En este marco, la psicología identificó varias razones por las que una persona podría no ser capaz de sostener la mirada durante una conversación:

1. Procesamiento cognitivo y concentración

En situaciones complejas, donde se requiere un nivel alto de procesamiento de información, el cerebro puede no ser capaz de mantener contacto visual y concentrarse en las palabras al mismo tiempo.

Este fenómeno fue estudiado por los psicólogos Michio Naumura y Shogo Kajimura, quienes sugieren que cuanto más complicada es la conversación, más difícil resulta para una persona sostener la mirada de su interlocutor. Este esfuerzo mental puede resultar agotador, y reducir el contacto visual permite liberar recursos cognitivos para procesar mejor la información.

2. Baja autoestima

La autoestima influye en la capacidad de una persona para mantener el contacto visual. Aquellas personas con autoestima baja pueden sentirse inseguras o expuestas al mirar a otra persona a los ojos, lo que les hace evitar esta interacción. En estos casos, el miedo a ser juzgados o percibidos negativamente es lo que motiva la evasión del contacto visual, ya que mantener la mirada puede resultar incómodo y hacer que la persona se sienta vulnerable.

3. Ansiedad social

Quienes padecen de ansiedad social suelen evitar el contacto visual debido a la incomodidad que sienten al ser observados o al tener que mirar directamente a los ojos de otra persona. La mirada de otra persona puede generar en ellos un temor a ser juzgados o a quedar en una posición de vulnerabilidad. Este trastorno de ansiedad dificulta las interacciones sociales en general, y sostener la mirada se vuelve especialmente complejo por la intensa incomodidad que provoca.

Otros motivos por los que las personas no sostienen la mirada

Aparte de los factores ya mencionados, existen otras razones por las cuales una persona podría evitar el contacto visual:

Evitar compromisos

El contacto visual suele simbolizar una conexión con el otro, de modo que evitar la mirada puede ser una manera de evitar un compromiso emocional o una conexión más profunda.

Esta evasión puede surgir por una necesidad de mantener distancia emocional o por el miedo a que sus pensamientos o intenciones queden al descubierto. No sostener la mirada en estos casos actúa como un mecanismo de defensa que evita una posible vulnerabilidad.

Desinterés o temor al rechazo

El contacto visual también puede reflejar interés o atracción hacia la otra persona. En algunos casos, cuando alguien siente atracción por otra persona, evita el contacto visual para no mostrar sus sentimientos o por temor al rechazo.

Este acto de evitar la mirada puede parecer desinterés, pero en realidad, podría tratarse de una estrategia para proteger sus emociones ante una posible reacción negativa.

Deseo de escapar de la situación

En ciertos contextos, evitar el contacto visual puede ser una señal de incomodidad o un deseo de finalizar la conversación. Esta situación es evidente cuando alguien mira hacia otro lado, como hacia una puerta o un reloj. Este gesto de evitar la mirada directa indica que la persona está buscando una salida o se siente agobiada, más allá de cualquier señal de interés o desinterés en la conversación misma.

Cómo interpretar la falta de contacto visual y la importancia del contexto cultural

Es importante tener en cuenta que el contacto visual, o la ausencia del mismo, no siempre transmite los mismos mensajes en todos los contextos. Evitar la mirada no significa necesariamente que la persona esté ocultando algo o que tenga algo que ocultar. Las razones pueden ser múltiples y varían según el contexto y las características individuales.

Además, el significado de sostener la mirada o evitarla también puede variar considerablemente según el contexto cultural. En algunas culturas, el contacto visual se considera una muestra de respeto y atención, mientras que en otras se percibe como un acto de desafío o falta de respeto, sobre todo hacia figuras de autoridad.

Así, una persona que evita el contacto visual podría estar manifestando respeto de acuerdo con las normas culturales de su entorno, y no necesariamente inseguridad o desinterés.

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