Contenido
Las posiciones para dormir pueden influir en nuestra salud de maneras que ni siquiera imaginamos. La postura que adoptamos al descansar afecta desde el alineamiento de nuestra columna vertebral hasta el estado de ánimo con el que comenzamos el día. Dormir de lado, boca arriba o boca abajo puede tener efectos diferentes en nuestras articulaciones, músculos y respiración, así como en la calidad del sueño en general. Según estudios recientes del International Journal of Clinical and Health Psychology nuestra posición para dormir no solo influye en la salud física, sino también en la mental y emocional, afectando nuestro bienestar general a largo plazo. ¿Cuál es la mejor?
Dormir en la posición correcta puede prevenir dolores y mejorar la calidad del sueño, mientras que una mala postura puede generar problemas a largo plazo. Dormir boca arriba, por ejemplo, es una de las mejores opciones para mantener la columna vertebral alineada y evitar la presión en las articulaciones. Sin embargo, quienes sufren de apnea del sueño podrían experimentar dificultades al respirar en esta posición. Por otro lado, dormir de lado, especialmente en la postura fetal, es comúnmente preferida por ser más cómoda para la mayoría de las personas, pero podría generar tensión en las caderas y hombros. Finalmente, dormir boca abajo se desaconseja en la mayoría de los casos, ya que genera una presión innecesaria sobre el cuello y la espalda, lo que puede causar molestias a lo largo del día. Es importante encontrar una posición que equilibre confort y salud, sin que ponga en riesgo la estructura postural.
La mejor posición para dormir
Posición boca arriba: la ideal para la columna
La posición de dormir boca arriba es generalmente recomendada por los expertos por la cantidad de beneficios que ofrece para la columna vertebral y el cuello. Al estar en esta posición, el cuerpo mantiene una alineación natural, lo que reduce el riesgo de dolores en el cuello y espalda.
Además, favorece la distribución uniforme del peso corporal, lo que minimiza la presión en las articulaciones. Sin embargo, esta postura puede agravar problemas respiratorios como la apnea del sueño y el ronquido, ya que la lengua puede obstruir las vías respiratorias al estar en esta posición. Por tanto, si bien es ideal para el descanso físico, no es recomendada para personas con trastornos respiratorios.
Dormir de lado: comodidad y circulación
Dormir de lado es una de las posiciones más comunes y cómodas, y tiene varios beneficios. Esta postura facilita la respiración, lo que la convierte en una buena opción para personas con apnea del sueño o problemas respiratorios.
También es recomendada para las mujeres embarazadas, ya que favorece la circulación y evita la presión sobre los órganos. Sin embargo, dormir siempre en el mismo lado puede generar tensión en el hombro y la cadera, y puede contribuir a la aparición de arrugas en el rostro debido a la presión constante de la almohada. Para quienes prefieren esta postura, se recomienda alternar de lado y utilizar almohadas adecuadas para evitar molestias.
Dormir boca abajo: riesgos y desventajas
La posición boca abajo es la menos recomendada por los expertos debido a los múltiples problemas que puede ocasionar. En esta postura, la columna vertebral no mantiene su alineación natural, lo que puede generar tensión en la zona lumbar.
Además, el cuello debe girarse hacia un lado para poder respirar, lo que provoca tensión en los músculos del cuello y puede derivar en dolor crónico. Aunque algunas personas prefieren esta posición porque les ayuda a evitar el ronquido, los efectos negativos sobre la columna y las articulaciones la hacen una opción poco saludable para el descanso a largo plazo.
En general y según los expertos, se concluye que mejor postura para dormir es de lado preferiblemente si lo haces sobre el lado izquierdo, y luego boca arriba.
Consejos para mejorar tu postura al dormir
Independientemente de la posición que elijas, existen formas de mejorar tu postura al dormir para garantizar un mejor descanso y salud. Utilizar almohadas adecuadas es fundamental para mantener la alineación de la columna.
Si duermes de lado, una almohada entre las rodillas puede aliviar la presión en las caderas y ayudar a mantener la espalda recta. Si prefieres dormir boca arriba, coloca una almohada debajo de las rodillas para mantener la curvatura natural de la columna.
Además, es importante cambiar de posición durante la noche para evitar la presión constante sobre una sola parte del cuerpo.
La postura que adoptamos al dormir tiene un impacto significativo en nuestra salud física y bienestar general. Cada posición tiene sus pros y contras, y es importante identificar cuál es la más adecuada según nuestras necesidades específicas.
La clave está en encontrar un equilibrio entre confort y salud, haciendo pequeños ajustes que nos permitan descansar mejor. Como recomienda Psychology Today, no solo debemos prestar atención a cuántas horas dormimos, sino también a cómo lo hacemos, para garantizar un descanso reparador y una mejor calidad de vida.
Un buen descanso no solo depende de la posición, sino también de crear un ambiente propicio para el sueño reparador.