Muchos juegan a las cartas, pero este juego es mejor para trabajar la atención y los reflejos en mayores de 70

A los 70 años, la agilidad mental ya no es la más rápida que puede haber, sino que va más a lo básico: reaccionar rápido, recordar lo justo y no perder el hilo en mitad de una conversación. Actividades como cocinar, hacer recados o simplemente seguir el ritmo del día ya suponen un reto. Y es ahí donde se nota el cambio.

Si bien no hay una pastilla mágica que lo arregle todo, sí existen actividades que pueden servir de ayuda. Una de ellas es tan simple que muchos ni se lo imaginan. Se trata de un juego de cartas que, sin parecerlo, mantiene la mente despierta y entrena los reflejos.

Este es el juego de mesa que sirve para entrenar la mente a los 70 años

Jungle Speed es uno de esos juegos que parecen una tontería hasta que lo pruebas. Está pensado para poner a prueba la rapidez visual y la coordinación. No necesitas experiencia, sólo reflejos y ganas de pasarlo bien. Se juega con 80 cartas con dibujos geométricos parecidos entre sí, y un tótem que se coloca en el centro de la mesa.

Cada jugador va destapando cartas una a una, y cuando dos coinciden, empieza el duelo: el primero que agarra el tótem se libra de sus cartas; el más lento se las lleva todas. Así de simple. Aunque claro, lo complicado es distinguir bien las cartas, porque muchas se parecen tanto que el error es casi inevitable. Y ahí es donde entra en juego la agudeza visual y la rapidez mental.

Lo interesante es que, sin darte cuenta, estás entrenando la concentración, los reflejos, la atención al detalle y hasta el autocontrol. Porque si te lanzas antes de tiempo y coges el tótem por error todas las cartas en juego van a tu montón.

Además, hay cartas especiales que cambian las reglas al instante. A veces hay que coincidir por color, otras todos compiten a la vez. Todo se vuelve impredecible. No hay descanso, y eso es justo lo que lo hace adictivo.

Cómo funciona el juego Jungle Speed paso a paso

La preparación es rápida: se reparte el mazo entre los jugadores, se pone el tótem en el centro, y cada uno coloca sus cartas boca abajo frente a él. En su turno, destapa la carta superior y la coloca boca arriba. Si hay coincidencia entre dos jugadores, se enfrentan por el tótem. El que lo coge primero gana. El que pierde, acumula cartas.

Hay sanciones claras: si alguien coge el tótem sin motivo o lo tira al suelo, se lleva todas las cartas que hay sobre la mesa.

La versión original viene en una bolsa de tela que puedes meter en una mochila. Perfecto para viajes, tardes en casa o reuniones familiares. También puedes crear una versión casera con un vaso como tótem y cartas hechas a mano con dibujos parecidos.

A los 70 años de edad, no se trata de pasarse el día viendo la televisión o dejando que el tiempo corra sin más. Es necesario moverse, mantener la cabeza activa y buscar cosas que obliguen a pensar, aunque sea un poco.