Contenido
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- 0.2 Jamás debes prohibir las chuches a tus hijos, según este psicólogo
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- 1 1. Son incapaces de manejar las emociones
- 2 2. Son egocéntricos
- 3 3. Culpan a los demás
- 4 4. Carecen de empatía
- 5 5. Son incapaces de establecer límites
- 6 6. Tienen dependencia de sus hijos
Ser padres no significa ser emocionalmente maduros, y la inmadurez puede afectar a la crianza de los hijos. Existen señales claras que te ayudarán a identificar si estás teniendo comportamientos inmaduros. Estas seis características son algunas claves.
1. Son incapaces de manejar las emociones
Una crianza inmadura puede afectar a los niños. Esto puede generar en un contexto inestable con repercusiones emocionales a largo plazo. Los padres inmaduros pueden tener dificultades para gestionar sus emociones. Son inestables y pueden mostrar comportamientos radicales: romper a llorar, rabietas infantiles, etc.
Un día pueden ignorar un comportamiento y al día siguiente reaccionar de una forma exagerada. Esta falta de coherencia puede generar confusión y ansiedad de sus hijos. La incapacidad de gestión de las emociones por parte de los padres pueden crear un entorno familiar tenso.
2. Son egocéntricos
Uno de los signos más evidentes de inmadurez emocional es el egocentrismo. Los padres inmaduros son egocéntricos y suelen dar prioridad a sus deseos por encima de los de sus hijos.
Algunos ejemplos de ellos podrían ser gastarse dinero en lujos personales y descuidar las necesidades básicas de los niños. También suelen priorizar su vida social sobre la vida familiar.
3. Culpan a los demás
No reconocen sus errores e incluso culpan a los demás de sus faltas. No asumen responsabilidades y fomentan una cultura de la culpabilización dentro de la familia. A veces, pueden llegar a inventarse argumentos irrazonables para justificarse.
La inmadurez emocional hace que estos padres se pongan a la defensiva cuando se le confrontan. No se disculpan ni intentan hacerlo mejor.
4. Carecen de empatía
A los padres inmaduros les falta empatía. Les da igual los puntos de vistas de sus hijos o de su pareja. Si no están de acuerdo en algo, cree que su punto de vista siempre es el mejor y no te darán la razón nunca.
Esta falta de comprensión o consideración por los sentimientos de los demás puede invalidar las emociones de sus hijos y estos pueden sentir que no se les escucha ni se les valora.
5. Son incapaces de establecer límites
Los padres inmaduros tienen dificultades para dejar claro cuáles son los límites adecuados. Esto puede derivar en no respetar la privacidad de sus hijos, comparten información inapropiada, etc.
6. Tienen dependencia de sus hijos
Al carecer de una gestión eficaz de las emociones, los padres con inmadurez pueden llegar a depender de sus hijos para obtener apoyo emocional o compañía. Esto puede suponer una carga injusta para los niños e interferir en su desarrollo psicológico.
Estas son algunas características que suelen compartir los padres inmaduros. ¿Te sientes identificado/a con algunas de ellas?