Contenido
- 0.1 Ni libros ni videojuegos: el pasatiempo que hace a los niños más inteligentes y los padres no nos damos cuenta
- 0.2 Qué significa que una persona deje de hablarte cuando se enfada contigo, según la psicología
- 0.3 Ni fútbol ni ajedrez: el juego de toda la vida que mejora la motricidad y creatividad de los niños menores de 10 años
- 1 Las rutinas que suelen hacer quienes tienen un alto coeficiente intelectual
Tener un alto coeficiente intelectual (CI) no se limita a obtener buenos resultados académicos o resolver acertijos rápidamente. Estas personas suelen destacar por su capacidad de análisis, pensamiento abstracto, curiosidad constante y habilidades para resolver problemas complejos. Estas cualidades se reflejan también en su forma de vivir el día a día: su rutina, sus hábitos y su forma de interactuar con el mundo son distintos, estratégicos y, sobre todo, muy intencionales.
La Asociación Española de Superdotados y con talento para niños, adolescentes y adultos, AEST, asegura que «los alumnos de Altas Capacidades Intelectuales tienen una capacidad de aprendizaje muy superior a la media y una forma de aprender radicalmente distinta». Esta inteligencia se manifiesta en diversos ámbitos: desde el lenguaje y la memoria hasta la capacidad para detectar patrones complejos. Aunque no siempre se identifica a simple vista, un alto CI influye directamente en la forma en que una persona organiza su vida, toma decisiones y establece rutinas. Son observadoras, analíticas, reflexivas y tienen una gran capacidad de adaptación. Disfrutan del aprendizaje continuo, poseen un agudo sentido del humor y tienden a valorar la soledad como un espacio para pensar. En su rutina diaria, priorizan el orden mental y físico: leen a diario, planifican el tiempo con precisión y prefieren actividades que estimulen la mente, como escribir, tocar instrumentos o resolver acertijos.
Las rutinas que suelen hacer quienes tienen un alto coeficiente intelectual
Comparten más cosas: suelen cuidar su alimentación y practicar meditación o ejercicio físico como forma de mantener el equilibrio entre cuerpo y mente. Este tipo de personas no solo buscan productividad, sino propósito y sentido en cada actividad que realizan.
Suelen presentar una combinación de rasgos mentales, emocionales y conductuales que las distingue del promedio. Entre sus características más destacadas están:
- Capacidad de concentración alta
- Alta curiosidad intelectual y deseo constante de aprender
- Habilidad para resolver problemas complejos de forma creativa
- Pensamiento crítico y analítico
- Elevada memoria a largo plazo
- Amplio vocabulario y dominio del lenguaje
- Autonomía y pensamiento inteligente
- Capacidad de adaptación a nuevas situaciones
- Empatía y alta sensibilidad emocional
Estas cualidades suelen desarrollarse desde la infancia y fortalecerse con el tiempo, especialmente si se fomenta el aprendizaje autodirigido y el pensamiento libre.
Los hábitos y rutinas de personas con alto coeficiente intelectual
Las personas con un alto coeficiente intelectual tienden a seguir rutinas centradas en el bienestar mental, físico y emocional. Las rutinas más comunes incluyen:
Lectura diaria
La mayoría dedica tiempo cada día a la lectura. Prefieren libros que les desafíen intelectualmente: ciencia, filosofía, psicología, literatura clásica, historia o ensayos.
Aprendizaje constante
Se interesan por nuevos temas, toman cursos en línea, aprenden idiomas, investigan sobre tecnología, arte o ciencia. Les gusta aprender cosas nuevas y esto forma parte, muchas veces, de su entretenimiento.
Planificación y organización
Utilizan agendas, aplicaciones o sistemas de productividad para organizar sus tareas. Les gusta optimizar el tiempo y establecer objetivos claros.
Reflexión y pensamiento profundo
Dedican momentos del día a pensar sin distracciones. Les gusta reflexionar, escribir en diarios o simplemente meditar sobre ideas abstractas. Y se centran en una tarea en cuestión y no en muchas a la vez.
Ejercicio físico moderado
Muchos practican caminatas, yoga, natación o entrenamientos que mejoran la función cognitiva y reducen el estrés.
Alimentación consciente
Eligen alimentos saludables que favorecen la claridad mental, como frutas, verduras, frutos secos y pescado. Saben qué es saludable y qué no, y lo llevan a cabo.
Evitan el ruido mental
Reducen el tiempo en redes sociales y evitan distracciones innecesarias. Prefieren ambientes tranquilos para pensar y trabajar.
Vínculos selectivos
Se rodean de personas que estimulen el pensamiento crítico y con quienes puedan mantener conversaciones profundas e interesantes.
Realizan hobbies creativos
Les gusta escribir, tocar instrumentos, pintar, diseñar o resolver rompecabezas. Actividades que combinan lógica con creatividad. Todo lo que les hace pensar y estimular su imaginación.
Buen descanso
Valoran el descanso como parte esencial del rendimiento intelectual. Suelen tener rutinas de sueño estables y reparadoras.
Consejos y recomendaciones para potenciar un alto CI
Tanto si ya tienes un CI elevado como si deseas estimular tu capacidad intelectual, estos consejos te ayudarán a desarrollar mejores rutinas:
- Fomenta la curiosidad: nunca dejes de hacer preguntas ni de explorar nuevos temas.
- Lee todos los días: la lectura amplía tu vocabulario, estimula tu mente y mejora tu pensamiento crítico.
- Rodéate de personas que te inspiren: busca entornos donde se valore la conversación profunda y el pensamiento creativo.
- Aprende a gestionar el tiempo: planifica tu día para equilibrar el trabajo, el descanso y el aprendizaje.
- Cuida tu cuerpo: una mente brillante necesita un cuerpo sano. Duerme bien, come equilibradamente y haz ejercicio.
- Evita la sobreestimulación digital: limita el uso de redes sociales o contenido superficial que agote tu atención.