Contenido
- 0.1 El rasgo común que comparten todas las personas que viven 100 años
- 0.2 La hora exacta a la que debes cenar según la ciencia: se confirma
- 0.3 Todo el mundo piensa que no es saludable, pero los expertos recomiendan comer este alimento a diario
- 1 La fruta contra el estreñimiento: un remedio natural y delicioso
El estreñimiento es un problema digestivo común que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por una disminución en la frecuencia de las deposiciones, dificultad para evacuar o una sensación de vaciado incompleto. Aunque existen múltiples factores que pueden desencadenarlo, como el estrés, el sedentarismo y una alimentación pobre en fibra, la solución muchas veces se encuentra en pequeños cambios en la dieta. Entre los alimentos que pueden ayudar a combatir el estreñimiento, está la fruta que va bien, el mango, que destaca por su alto contenido en fibra, su riqueza en agua y sus propiedades digestivas naturales.
A diferencia de los suplementos de fibra y los laxantes, que pueden generar dependencia o efectos adversos si se usan en exceso, el mango ofrece una opción más equilibrada y natural para mejorar la salud intestinal. Su combinación de fibra soluble e insoluble, junto con la presencia de enzimas digestivas y compuestos bioactivos, facilita el tránsito intestinal de manera efectiva. Además, su delicioso sabor y versatilidad lo convierten en una alternativa fácil de incorporar a la dieta diaria. Vemos por qué el mango puede ayudar a combatir el estreñimiento, qué dice la ciencia sobre sus beneficios y cómo consumirlo para obtener el máximo provecho.
La fruta contra el estreñimiento: un remedio natural y delicioso
Uno de los principales beneficios del mango en la salud digestiva es su alto contenido en fibra. Según la Comunidad de Madrid la fibra juega un papel esencial en la regulación del tránsito intestinal, ya que ayuda a aumentar el volumen de las heces y facilita su paso por el intestino.
El mango contiene dos tipos de fibra:
Fibra soluble, que se disuelve en agua y forma una especie de gel en el intestino, favoreciendo el crecimiento de bacterias beneficiosas y suavizando las deposiciones.
Fibra insoluble, que añade volumen a las heces y estimula el movimiento intestinal, reduciendo el tiempo de tránsito en el colon.
Una porción de 200 gramos de mango puede aportar hasta 5 gramos de fibra, lo que representa aproximadamente el 20% de la cantidad diaria recomendada para un adulto.
Hidratación y contenido en agua
El agua es un factor clave en la prevención del estreñimiento, ya que facilita el movimiento de los desechos a través del sistema digestivo. El mango, además de ser una fruta rica en fibra, tiene un alto contenido en agua, lo que contribuye a mantener las heces hidratadas y a prevenir su endurecimiento.
La Cruz Roja explica que una hidratación adecuada es fundamental para el buen funcionamiento del intestino. Cuando el organismo no recibe suficiente agua, el colon la absorbe de las heces, haciéndolas más secas y difíciles de expulsar.
Comer mango regularmente ayuda a complementar la ingesta de líquidos y favorece un tránsito intestinal más eficiente.
Enzimas digestivas y compuestos bioactivos
Otro aspecto clave de esa fruta en la salud digestiva es la presencia de enzimas naturales que facilitan la digestión. La más destacada es la amilasa, una enzima que descompone los carbohidratos complejos en azúcares más simples, facilitando su absorción en el intestino delgado.
Estas enzimas no solo mejoran la digestión en general, sino que también pueden contribuir a reducir la hinchazón y la sensación de pesadez.
Además, el mango contiene compuestos bioactivos como los polifenoles y los carotenoides, que han demostrado tener efectos antiinflamatorios y prebióticos. Estos compuestos favorecen el equilibrio de la microbiota intestinal, promoviendo el crecimiento de bacterias beneficiosas que regulan la función digestiva.
Mango vs. Los suplementos de fibra
Si bien los suplementos de fibra pueden ser útiles en casos específicos, el consumo de fibra a través de alimentos naturales como el mango ofrece ventajas adicionales. A diferencia de los suplementos, que pueden causar hinchazón o malestar si se consumen en exceso, el mango aporta una combinación equilibrada de fibra, agua, enzimas y antioxidantes, y esto favorece un proceso digestivo más natural y sin efectos secundarios.
Además, esta fruta es una fuente rica en vitaminas A, C y E, que fortalecen el sistema inmunológico y protegen la mucosa intestinal. Esto lo convierte en una alternativa más saludable y nutritiva para quienes buscan mejorar su tránsito intestinal sin recurrir a soluciones artificiales.
¿Cómo incorporar el mango a la dieta para combatir el estreñimiento?
Para obtener los beneficios del mango en la salud digestiva, es recomendable incluirlo de forma regular en la dieta. Algunas formas fáciles de consumirlo incluyen:
- Fresco y en trozos: comer mango maduro como postre o snack es una manera sencilla de aprovechar sus propiedades.
- Batidos y smoothies: mezclar mango con yogur natural y otras frutas ricas en fibra, como la papaya o la ciruela, potencia su efecto digestivo.
El mango es una fruta deliciosa y altamente efectiva para combatir el estreñimiento de manera natural. Su alto contenido en fibra, su riqueza en agua y la presencia de enzimas digestivas siendo un aliado ideal para mejorar la función intestinal sin necesidad de recurrir a laxantes o suplementos artificiales.