Ni andar ni correr: el ejercicio recomendado para que los mayores de 60 se mantengan en forma, según Harvard

Esta actividad ofrece resultados que no sólo fortalecen el cuerpo, sino que también estimulan la mente y fomentan la conexión social

Hombre, deporte, actividades

Hombre con ropa de deporte.

Mantenerse activo y en forma no es ningún lujo. Es necesidad. Quienes se mueven con regularidad no sólo lo dicen, sino que lo muestran: duermen mejor, tienen más energía, menos dolores y, en general, encaran el día con otra cara. Y lo mejor es que eso aplica también a quienes ya pasaron los 60.

La verdad es que la vejez no es una condena al sofá . El cuerpo sigue siendo capaz de adaptarse, de mejorar, de aprender. Pero, claro, no todo ejercicio sirve igual. Hay prácticas que ayudan y otras que castigan. Por eso, los especialistas están recomendando algo que pocos esperaban: artes marciales.

Este es el ejercicio que deberían hacer los mayores de 60

El ejercicio que recomiendan los expertos a los mayores de 60 no es correr ni ponerse a hacer abdominales en el gym como locos, sino algo mucho más interesante y eficaz: las artes marciales.

Cuando se habla de esta actividad, puede que se venga a la mente la imagen de una película de Jackie Chan, con golpes a tablas y saltos mortales. Pero la realidad es que disciplinas como el Tai Chi, el Aikido o el Wing Chun no van por ahí.

Las artes marciales se adaptan a las necesidades de cada quien. Se centran en el equilibrio, la precisión y la conciencia corporal. Los movimientos son lentos, pero entrenan rápido el cuerpo y la cabeza.

El Tai Chi, por ejemplo, es casi una coreografía: movimiento suave, respiración profunda, enfoque. Ideal para quienes arrastran molestias articulares o quieren evitar caídas. No hay que dejarse engañar por las apariencias, porque lo que tiene de tranquilo lo tiene de potente: mejora la coordinación, baja el estrés y fortalece músculos sin que uno se dé cuenta.

El Aikido es otra opción totalmente diferente. Se usa la fuerza del otro, no la propia. Gira, redirige, acompaña. No hay impacto ni choques innecesarios. Es casi algo filosófico: ganar sin pelear. Y en lo físico, es una joya para mantener la movilidad sin riesgos.

Wing Chun, en cambio, trabaja desde la cercanía. Se basa en movimientos cortos, eficientes. Nada de saltos ni acrobacias peligrosas para los adultos mayores. Lo importante es la técnica, el equilibrio y la reacción. Una buena elección para quien busca un poco más de ritmo sin dejar la seguridad.

Y si alguien quiere algo más dinámico, el Jiu Jitsu también tiene su lugar. Hay versiones adaptadas que dejan de lado el combate y se enfocan en el aprendizaje progresivo de técnicas de defensa. Es importante destacar que no se trata de competir, sino de reaprender a moverse, a caer sin miedo, a usar el cuerpo con inteligencia.

¿Por qué es tan bueno este ejercicio para los adultos mayores?

Las artes marciales tienen un enfoque doble: se trabaja el cuerpo y la mente. Hay que memorizar movimientos, concentrarse, ajustar detalles. Es una gimnasia completa, pero con sentido. Nada de ir en piloto automático.

El Dr. Peter M. Wayne, de la Escuela de Medicina de Harvard, lo comprobó en un estudio sobre Tai Chi y envejecimiento saludable. Los resultados mostraron que mejora la complejidad fisiológica, lo que quiere decir que el cuerpo responde mejor al paso del tiempo.

Además, las clases de artes marciales crean comunidad. Los mayores entrenan con otros, comparten progresos, se acompañan. Recuperan la motivación, se sienten parte de algo. Y con eso, logran volver a socializar, en una etapa donde hacerlo no siempre es fácil.

Si bien es una opción estupenda, hay que tener en cuenta consultar con un médico antes de empezar, y elegir instructores que sepan trabajar con adultos mayores.

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