Es bien sabido por todas las personas que mantener una rutina de cuidados durante las vacaciones puede ser una misión muy difícil, ya que por lo general, es tiempo de olvidarse de los horarios y darse esos gustos que durante el año evitamos. Sin embargo, nada es imposible: si se trata de determinados hábitos, puedes compatibilizarlos sin mayores complicaciones con tu día a día por más que te encuentres en tiempo de vacaciones. Buscar equilibrios, darse un momento para prestar atención a determinados movimientos corporales, o bien sumar nuevos; al igual que recordar hidratarte con alarmas y apps pueden ser algunas de las formas que te ayuden a mantenerte en forma, de manera saludable, para mantener tu bienestar.
En ese sentido, cada vez son más los destinos que proponen actividades deportivas o espacios de ejercicio para quienes prefieren tomarse un tiempo para cuidar su salud; a la vez que también suman algunos menús saludables, o bien, opciones con más verduras y frutas. También, están aquellos lugares del mundo en el que la práctica del deporte puede ser una de las opciones más divertidas para pasar el tiempo, como por ejemplo en el mar, donde se pueden hacer actividades relacionadas al surf; o bien en las altas cumbres, donde se puede aprovechar la nieve para esquiar. Es decir, si bien no cumples con tu rutina de ejercicios en un gimnasio tradicional, lo importante es que puedas mantener el hábito haciendo actividades que te mantienen en movimiento. Cabe destacar que la realización de un ejercicio físico te ayudará a la salud física pero también a la mental, ya que con ello lograrás relajar tu mente y aprovechar al máximo el ocio, como corresponde al momento de vacaciones.
¿Cómo seguir la rutina y mantener tu bienestar en vacaciones?
Si bien seguir horarios y estilos de vida puede ser muy difícil en momentos de vacaciones, lo importante es que puedas encontrar un equilibrio sano, tanto a nivel físico, como mental. Esto significa que, si prefieres no privarte de nada en las comidas y disfrutar del momento, tal vez puedas complementar haciendo alguna actividad física o incorporando una caminata intensa.
Recuerda que es esencial que evites aquellas comidas que pueden causarte un malestar, como por ejemplo el frito en momentos de mucho calor, o bien por la noche, ya que impactará significativamente en la calidad de tu descanso y no te permitirá disfrutar a pleno del destino elegido para tus vacaciones.
Lo mismo que, si eres de los fanáticos del deporte, recuerda que es fundamental que acompañes tu actividad física con una nutrición de calidad, por lo que puedes sumar algunos snacks para evitar que pases tantas horas exigiendo a tu cuerpo un rendimiento deportivo sin ingerir algún alimento que le ayude en la generación de energía. Por ejemplo, añadir a tu bol frutas cortadas, frutos secos, aceitunas o cereales que puedan servirte para sumar más energía a tu cuerpo.
Cuando una persona se encuentra de vacaciones, es fundamental que, en este tiempo, evite las situaciones de estrés a las que se somete de manera cotidiana, y relaje al máximo posible, con pocas obligaciones. Es por ello que seguir una rutina de cuidados puede ser complejo pero no imposible.
Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, «aprovecha las actividades cotidianas para hacer más actividad física: anda, aunque sea en trayectos cortos, sube escaleras, pasea con la familia o amigos, pasea en la pausa del café en lugar de sentarte…», es decir, incluye en tu día a día un momento para mover tu cuerpo, y eso será más que suficiente para equilibrar tus hábitos en momento de vacaciones.
Algunos trucos para seguir la rutina y mantener tu bienestar en vacaciones
Uno de los hábitos que es más sencillo de olvidar durante el tiempo de vacaciones es la ingesta de agua. Es importante que, sobre todo si se trata de temporada estival, esta costumbre se intensifique aún más, ya que con el calor puede generarse un golpe de calor que ponga en juego la integridad física de las personas que se están exponiendo al sol.
«Cuando nuestro cuerpo descansa, se repone físicamente y mentalmente. No sólo restituye la energía que hemos perdido a lo largo del día, sino que también nos previene de distintas patologías. Si bien es cierto que no todas las personas necesitan las mismas horas de sueño, éstas, según las voces expertas, deberían encontrarse entre las siete y las nueve diarias», destaca la Cruz Roja española, acerca del momento del descanso y la recuperación de energías.
Es fundamental mantener un equilibrio que permita un bienestar general, pero que esencialmente responda a las necesidades tanto físicas como mentales. Es imposible pensar en un bienestar general si no se tiene en cuenta la parte anímica y de descanso, ya que ello impactará de lleno en la salud mental de las personas.